Una simple foto de las manos de un hombre en un restaurante de Chicureo, encendió las alarmas de romance entre Gissella Gallardo y un misterioso galán. Si bien, en la imagen solo se ven los dedos del hombre, sosteniendo su celular de alta gama, junto a un shop de cerveza, las malas lenguas ya hablaban que Mauricio Pinilla habría pasado a la historia.
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Según salió a la luz pública la cita fue en el exclusivo restaurante Patagonia Chicureo. “La ex de Pinilla fue vista esta noche en la Patagónica de Chicureo con un misterioso galán”, contó en su Instagram una periodista de espectáculos y panelista de ”Zona de Estrellas”.
Fue tras esta filtración, que la propia Gallardo subió compartió su imagen, como para evitar malos entendidos, aunque sin mostrar a su acompañante.
Solo se limitó a colocar la frase “Gracias doc” y el emoji de unas manitas juntas, como en señal de agradecimiento.
“¿Y Pinilla?”
Dicen que donde fuego hubo cenizas quedan. Y al parecer una parrilla encendida sería la relación entre Mauricio Pinilla y su esposa Gissella Gallardo, quienes, tras la bullada separación, con desenfrenadas polémicas del exfutbolista, habrían hecho las paces y vuelto a compartir en familia.
Así quedó en evidencia, días atrás, en dos historias de Instagram que compartió la empresaria textil, donde se ve que están sentados en la misma mesa, con bikini y sin polera, disfrutando de un almuerzo en lo que fue un caluroso día de piscina.
La historia la compartió junto a la canción de David Guetta “Titanium” que su traducción en español habla de una persona que a pesar de las humillaciones nunca se dejaron derrumbar y demostraron su fuerza ante las adversidades.
“Te siento gritar. Pero ni una palabra llega. Hablo por hablar, sin que decir. Me criticas, pero tus armas no funcionarán. Dispara y verás que volveré. No me derribarás jamás. Dispárame, dispárame. Fuerte estoy, aquí me ves. Dispárame, dispárame. Nunca me verás caer...”, es parte de la letra que compartió Gallardo, quizás como parte de un mensaje subliminal.