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Pancho Saavedra se conmovió y le dio especial regalo a joven carpintero de 18 años en el último capítulo de “Lugares que hablan”

El conductor se emocionó porque la familia estaba “rescatando una tradición ancestral” de nuestro país.

Pancho Saavedra en "Lugares que hablan"
Pancho Saavedra en "Lugares que hablan"

En el último capítulo de “Lugares que hablan”, Pancho Saavedra protagonizó un emotivo momento tras conocer la historia de la familia de Francisca Agüero, quien tiene un hijo carpintero de ribera de 18 años llamado Marcos Uribe.

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En el espacio, expusieron que el joven estaba realizando una embarcación de 8 metros, pero le falta el motor, que debía trabajar tres meses navegando para poder conseguirlo.

Esta situación conmovió al equipo de Canal 13, por lo que decidieron entregarle un millonario regalo al adolescente.

“Este programa está cumpliendo 10 años, en donde uno se conecta también con las historias de personas muy sacrificadas en todos los rincones del país, pero cuando hay alguien de 18 años que lo que está haciendo, no es solamente buscarse una manera de ganar la vida, sino que también está rescatando una tradición ancestral, es por eso que nosotros hoy día queremos darte una ayuda, un reconocimiento”, explicó de entrada el conductor del programa.

“Así que hoy día el programa ‘Lugares que hablan’ te va a entregar un millón de pesos para que puedas dar el pie y te puedas comprar ese motor y, quizás, disfrutes unos días más con tu madre”, comentó Pancho.

Por su parte, el joven Marcos contó que le interesaría estudiar Ingeniería naval durante el próximo año, por lo que agradeció el inesperado gesto asegurando que es “una ayuda tremenda”.

La historia de una mujer 70 años que se traslada en un bote de plumavit

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Sin embargo, esta no fue la única ayuda que proporcionó el animador de Canal 13, puesto que Pancho también quiso cooperar con la situación de Marta Oyarzo de la comunidad de Colonia Sargazo de la Región de Los Lagos.

Todo comenzó cuando la mujer le contó que su marido, su hijo y cuñado murieron ahogados en el río Lenga, y que actualmente ella debe cruzar las aguas en un pequeño bote de plumavit.

Saavedra se emocionó al escuchar el relato, por lo que decidió llamar al alcalde de Puerto Montt, Gervoy Paredes, para asegurar la construcción de un camino seguro para todos los habitantes para que esta situación no se vuelva a repetir.

La autoridad se comprometió a tener listo el camino en un plazo de un mes y medio, y que se pondrían en contacto con Pancho para enviarle una fotografía.

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