Durante la jornada de este jueves fuimos testigos de un emotivo momento en el “Buenos Días a Todos”, en el cual Gino Costa se conmovió por la historia de un perro que se encontraba viviendo a las afueras de un Cesfam.
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La historia fue conocida como el caso del “Hachiko chileno”, puesto que el can se quedó en el recinto asistencial tras la muerte de su dueño hace dos meses, así que el personal de salud se hizo cargo de esta mascota.
A raíz de esta triste situación, el periodista decidió tomar cartas en el asunto y adoptar un nuevo miembro de su familia.
La llegada de Hachiko
Posteriormente, el can llegó hasta los estudios de TVN para tener su primer encuentro con su nuevo dueño, Gino.
“Yo no sabía si tomarlo en brazos pero es un regalón. Además es un fresco porque no pesca a los hombres, sólo a las mujeres”, fueron las primeras impresiones que tuvo el animador sobre la personalidad del perro.
Según las palabras que contó el periodista en una entrevista en LUN, el can le tiene miedo a varias cosas, entre ellas: las escaleras, los ascensores y los umbrales.
Sobre su primer encuentro con su otra perrita, Lorenza, Costa contó que tuvo que dejarlo en un lugar alejado de ella y que dada las recomendaciones de un experto, es mejor presentarlos fuera del hogar para que se “genere un buen vínculo”.
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Por consiguiente, Gino atinó a ponerle ropa de él para que el perrito se “acostumbre a mi olor”.
Finalmente, contó algunos detalles de su nueva mascota: El perro tiene 7 años de edad, no está esterilizado y, al parecer, tampoco tendría las vacunas al día.
“Estuve pensando que si la cambiaba el nombre, eso habla de un cambio en su vida, de una nueva etapa (...) ahora se llama ‘Hachi’ y todas sus penas quedarán atrás”, sentenció Gino Costa.