Fue el martes en la parte alta del Teatro San Ginés en Bellavista que el cantante Américo lanzó su reciente disco “Cumbia Despechada”, ante su esposa, hijos, seguidores y amigos más cercanos como Leo Rey, Daniel Fuenzalida y el futbolista Pablo Contreras. Un evento que tuvo degustación de tragos y, por supuesto, el nuevo hit del artista que pronto promocionará por Sudamérica y Europa.
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Vestido con la elegancia que lo caracteriza y junto a los integrantes de su banda entonó las nuevas canciones, las cuales surgieron tras un tiempo de desenfreno, al haberse separado de su esposa, madre de sus hijos. Mujer que propició el disco, pero que recién ese día en el San Ginés se enteró que fue la musa inspiradora de su marido.
“No tenía idea que fui su inspiración, me acabo de enterar”, dijo sorprendida a Publimetro, pero feliz de haber reestablecido la relación.
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“Voy a decirlo en buen chileno, me estresé, me empecé a portar mal, chupes más, chupes menos”, comentó al animador Ignacio Gutiérrez, quien hizo de maestro de ceremonia, revelando el motivo que lo dejó patitas en la calle.
“Retírate de aquí, la puerta es ancha”, le dijo su esposa cuando su mal genio se hizo insoportable. El destino fue su oficina, la cual se convirtió, literalmente, en su after office. Lugar donde dialogó con el alcohol y el corazón partido.
“Fue una semana de carrete, tomando solo”, reveló.
“Nace de la soledad y el alcohol”
Días grises que dieron vida al disco, como una luz de esperanza a la agonía que enfrentaba en ese momento, donde tampoco “me dejaban ver los niños, me fui en mala”, recordó.
Sin embargo, tras beber la última copa decidió levantar cabeza y contactar a la banda para convertir la tristeza en cumbia y melodías.
“Fue un shakirazo”, bromeó en relación a la canción que la colombiana le dedicó a su ex pareja Gerar Piqué.
“Nace del carrete, la soledad, el alcohol, la culpa, el enojo y el estrés”, confesó abiertamente el músico de 45 años, rememorando el triste episodio que vivió hace dos años atrás en pandemia, pero que, finalmente, gracias a la música, le permitió recuperar a su familia y erradicar el maldito virus del desamor.