Piqué no quería que sus hijos abandonaran Barcelona ¿Por qué no los defendió del ultimátum del abuelo?

Tras 9 meses de anunciar su separación, Shakira ya está instalada en Miami con sus hijos con los que pasa unos días de descanso antes de que ellos inicien sus actividades escolares en su nueva escuela y Gerard Piqué ya se encuentra a sus anchas en Barcelona.

A ambos les toca rehacer sus vidas y seguir adelante, pero para ningún padre es fácil separarse de sus hijos como le ha tocado al exfutbolista, quien pese a firmar el convenio con respecto a la custodia de Sasha y Milan, tenía la esperanza que los pequeños permaneciesen en Barcelona al menos hasta final del curso escolar.

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Lamentablemente la salida de la barranquillera de la mansión de la zona exclusiva de Barcelona dinamitó aun más los puentes de cordialidad que había entre la pareja.

Piqué no hizo nada para estar más tiempo con sus hijos

Pocos pueden entender que Piqué aceptara que su padre Joan Piqué Rovira, como administrador de Inversiones BCN Two & Two SL, le enviará una carta a la madre de sus hijos, exigiéndole abandonar la mansión de Esplugues de Llobregat y con plazo hasta el 30 de abril como máximo.

Los abuelos paternos no pensaron en lo que significaría para los niños abandonar abruptamente el nido que los vio nacer y crecer y, además, expulsar a su progenitora, quien debió poner en marcha su mudanza.

Según La Vanguardia, si la colombiana no salía de la mansión en el tiempo estipulado, debía hacer frente a una indemnización según el contrato de compraventa.

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Aun cuando Shakira tenía planes de salir en enero, los problemas de salud de su padre, William Mebarak, y posteriormente su madre, Nidia Ripoll, retrasó todo.

Ya está listo, el camino está abierto y sin obstáculos para que Piqué haga su vida con su novia Clara Chía Martí y sus padres, Montserrat Bernabéu y Joan Piqué, se quitan de encima “el estorbo” que significaba tener a la cantante de vecina.

Se avivan los rencores entre Shakira y el exfutbolista

Lo cierto es que esta salida tan abrupta de Shakira y los niños, deja nuevamente muy mal parado a Piqué que ni siquiera tuvo el interés de evitar este explosivo momento y lograr mantener a sus hijos un poco más de tiempo a su lado.

Si había alguna esperanza de que Shakira y Piqué “fumaran la pipa de la paz” al poner tierra de por medio, al parecer esta acción del abuelo de Sasha y Milan, actual administrador y Kerad Holding SL (la sociedad matriz de la que brotan las empresas del exfutbolista), dinamitó aun más la poca relación que puede existir entre unos padres que deben continuar con la educación de sus hijos.