Roberto Cox contó su experiencia con un masaje en Tailandia en un inicio de matinal que tuvo de todo: hasta se anduvo choreando con JC Rodríguez

Con varias anécdotas y tallas comenzó este miércoles 19 de junio el matinal de Chilevisión, “Contigo en la mañana”, las que se intensificaron cuando la meteoróloga Allison Göhler hizo su entrada y comenzó a hablar de las lluvias y de cómo estará el tiempo en los próximos días, instante en el que se sumó al panel el periodista Roberto Cox.

Fue ahí cuando Julio César Rodríguez le tiró una talla a su colega, diciéndole que ahora que estaba Allison Göhler y no Eduardo Sáez dando el tiempo en las mañanas, Cox llegaba más temprano.

“Antes llegaba con Eduardo (Sáez) a las 08:30. No, compadre, yo saco todos los rollos. Yo soy súper observador y tengo videos de respaldo”, dijo JC sin anestesia, algo que al parecer no le cayó muy bien a los involucrados, mientras Allison salía al paso diciendo que solo “somos compañeros de las noticias”.

“Con Eduardo Sáez llegaba a las 08:32 y con Allison a las 08:15 ya está entrando. Hay que pararlo, (hay que decirle) ‘oye, cálmate un poco’”, siguió diciendo Julio César, ante lo cual Cox contestó que “quieren armar un cahuín barato”.

“Te pasaste de largo, si estamos diciendo que estás llegando antes no más”, apuntó Julio César Rodríguez para cerrar el tema ante el choreo de Cox.

Roberto Cox y su masaje tailandés

Luego, siguieron conversando de varios temas, instante en el que empezaron a hablar de los masajes. Ahí, mientras Julio César Rodríguez contaba una pésima experiencia, y Monserrat Álvarez aseguraba que se ha hecho “de todos los masajes”, pero siempre con mujeres porque hay más confianza, Roberto Cox recordó una situación que vivió en Tailandia.

De acuerdo a lo relatado por el periodista, optó por probar un masaje ante tanta oferta en ese país, y luego de haber sido masajeado por una chica, ésta le preguntó sin mayores aspavientos si iba a optar por el “final feliz” del masaje.

Ante las risas de sus compañeros, y las preguntas sobre si dicho “final feliz” se trataba de un servicio sexual, Cox señaló que efectivamente, el ofrecimiento realizado en inglés tenía un “gesto técnico”, lo que generó muchas más risas.

El periodista puntualizó eso sí que rechazó la oferta y que “nunca más me hice un thai massage”.