Todo parece indicar que las difiucultades seguirán agobiando a Mariana en “Juego de Ilusiones”, pero contará providencialmente de emotivas satisfacciones en su reclusión en la cárcel.
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En efecto, en el capítulo 364, al cual Página 7 accedió a través de Mega Go, la protagonista de la teleserie diurna vivirá un gratificante reencuentro.
Ello será posible gracias a que Irene estableció la sociedad con Martín y Patricia por la propiedad del recinto penitenciario de El Faro, pasando a ser entonces de manera oficial accionista del negocio carcelario.
Ello le permite al personaje de Loreto Valenzuela acceder a mayor cercanía con su hija, por lo que, luego de firmar, solicita una visita guiada por las dependencias del penal.
En su recorrido, la abuela de Joaquín se reencuentra con el rol de Carolina Arregui en la cocina del centro de reclusión, lo que llega a ser una muy bonita y emotiva situación entre madre e hija dado que no se veían desde el fallido intento de escape de la cárcel.
Mariana otra vez deberá sortear dificultades en El Faro
Luego de esta escena, la exesposa de Julián caminó hasta su celda y se encontró sorpresivamente con un sobre, en cuyo interior había una fotografía de Javiera, al momento de ser detenida por haberle disparado al hombre que trató de secuestrarla.
Esta imagen desespera a Mariana, lo cual la hace buscar a toda costa la forma de comunicarse cuanto antes con la menor de sus hijas.
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En dicho trance, la madre de las hermanas Mardones Nazir recuerda el teléfono celular de Alana Rumián, el cual mantenía oculto en un escondito en el baño del penal, y recurre al equipo para llamar cuanto antes al personaje de Fernanda Finsterbusch.
No obstante, nunca imaginó que sería sorprendida in fraganti en su habitación luego de que ingresara la gendarme Tamara Faúndez. Los teléfonos celulares están prohibidos en las cárceles, falta por la cual Mariana podría ser recluída nuevamente a la celda de aislamiento y debería sortear más dificultades en el recinto penal.
