Iván Cabrera provocó las lágrimas de sus compañeras de encierro Alexandra “Chama” Ménez y Michelle Carvalho, al contarles detalles de los problemas con que tuvo que lidiar semanas antes de ingresar a “Gran Hermano”.
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En una extensa charla que sostuvo en la cocina de la casona fue que el exintegrante de Yingo les reveló a la venezolana y brasileña cómo un “trabajo” de “malas energías” lo había sumido junto a su familia en una serie de dificultades, incluso económicas, que lo llevaron a pedir ayuda para “limpiarme de esas malas energías”.
La historia del ingreso de Cabrera a Gran Hermano
“Fui, porque soy creyente”, inició el bailarín, quien le aseguró a Méndez y Carvalho que en esa sesión con una “mujer a la que llegué gracias a un amigo”, le indicaron que “había que hacer una limpieza aún mayor”, y que de ahora en adelante “tu vida va a cambiar. Y créeme que va a ser de un momento a otro”.
“Te prometo por Dios, siempre he tenido peguitas, gracias a Dios, pero últimamente venía como (hace un gesto indicando hacia abajo). Me hace el diagnóstico y el trabajo, y estas cuestiones más profundas también”, agregó Cabrera, quien reveló que para lograr llegar a la mujer sufrió muchas dificultades.
“Me dijo que las energías negativas no querían que llegáramos (a contactarnos)”, debido a que para poder atenderse con ella debía hacerlo luego de ser recomendado por alguien que se haya tratado antes con la guía espiritual. Algo que había hecho su esposa, Tifanny Magrini, pero que la propia espiritista no recordaba.
Me dijo que las energías negativas no querían que llegáramos (a contactarnos)
— Iván Cabrera
Luego de superar el impasse, relató Cabrera, pudo contactar a la mujer, quien tras atenderlo y hacerle un trabajo de limpieza, le aseguró que “de ahora en adelante, tu vida va a cambiar”. Un comentario que confirmó a los pocos minutos luego de una llamada por trabajo que le hizo un productor de eventos.
“Ese mismo día le dije a mi esposa e hijos que ‘de ahora en adelante, vamos a estar bien’, porque me voy a rajar la espalda trabajando”, aseveró, dando como ejemplo su ingreso al reality a las pocas semanas de haberse realizado el trabajo de limpieza.
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Tras el episodio, Cabrera no dudó en asegurarles a Méndez y Carvalho que entendía las dificultades de ellas como extranjeras en otro país, motivo más que suficiente para ofrecerles su ayuda una vez fuera del encierro. Un gesto que llevó a la venezolana a abrazarlo y a Michelle a soltar unas lágrimas por la historia de Cabrera.
“Siempre van a tener las puertas abiertas de mi corazón para lo que sea en el momento que sea (…) siempre va a estar disponible mi teléfono a la hora que sea (…) no pasa desapercibido para mi el haber estado con ustedes”, concluyó.