Un importante susto de salud vivió el empresario Emeterio Ureta, quien este sábado fue dado de alta después de una intervención para colocarle un marcapasos. El padre de Tita Ureta pudo haber fallecido debido a la baja frecuencia cardiaca que presentó cuando llegó al hospital.
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“Entré a la clínica con 32 de frecuencia cardiaca por minuto, lo que es bajísimo. Podría haber muerto. Ahora, me recuperé. Estoy con 72 pulsaciones por minuto, que es lo normal, gracias al marcapasos”, le confesó a LUN.
Él fue internado después de que el martes recibió un llamado informándole que los exámenes médicos que había realizado el día anterior, no arrojaron buenos resultados. Todo esto mientras estaba grabando para el programa de Mega, “De paseo”.
“Me dijeron que estaba en un riesgo vital. Que en cualquier momento me podía caer o desmayar y morir. Partimos con la Tita a la clínica. Programaron la operación y me pusieron el marcapasos el viernes a las 10 de la mañana”, comentó el “Marqués del Arrayán”.
Al ser consultado si es que en algún momento sintió miedo a morir, él confesó que no, pero reflexionó sobre cómo cambia el mundo. “Estaba grabando el programa, muerto de la risa, comiendo langosta, y ahí en medio de todo esto me llega el telefonazo y me fui de espalda. Tita se puso más nerviosa. Dejó todo botado y se vino al tiro conmigo”
La intervención de Emeterio
Emeterio Ureta entregó detalles sobre su operación y explicó que le “hicieron un tajito arriba de la tetilla izquierda. Te meten toda esta cuestión a presión con dos cablecitos y los conectan al corazón”.
“Es todo muy interno, una cosa fantástica. Me pusieron anestesia y no supe cuánto tiempo pasó. Tiene que haber durado una hora. Ahora estoy impecable, no siento dolor, nada de nada hasta el momento. Esto me da cuerda para rato”.
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Una vez que fue dado de alta, él fue al nuevo departamento de su hija Tita Ureta, con quien pasará el fin de semana. Sin embargo, Emeterio no tiene planes de descansar mucho, ya que señaló que “el domingo en la noche o lunes en la mañana me vuelvo a mi casa, me cambio ropa y me voy a mi trabajo”.
“Yo creo que el médico me dará dos días de reposo, sólo caminar y no hacer cosas que requieran fuerza”, agregó Ureta.