Finalmente este sábado 9 de agosto en horario prime, regresa a las pantallas de Canal 13 la séptima temporada del programa “Siempre hay un chileno”, el que tendrá un total de 12 capítulos en 12 países diferentes.
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Al respecto, Marcelo Kiwi, que es el creador, realizador y líder del programa, adelantó que “esta temporada es intensa. Viajamos mucho, conocimos a chilenos en rincones inesperados, y cada lugar nos sorprendió con algo distinto. A veces las cosas salían perfecto, otras veces todo cambiaba a última hora y había que improvisar. Pero eso también tiene su gracia. Lo mejor es que en cada destino encontramos historias que valía la pena contar”.
Algunas anécdotas que marcarán la nueva temporada
En ese sentido, Marcelo Kiwi contó algunas anécdotas que marcarán la nueva temporada del programa, como la visita a Venecia en Italia, una ciudad muy turística que visitaron en temporada baja.
“Fuimos en pleno invierno, con la ciudad casi vacía. Venecia sin turistas es otra cosa… más íntima, más mágica. Lo divertido fue que nos topamos con varios chilenos turisteando que estaban completamente perdidos, porque Venecia es literalmente un laberinto. Todos con el GPS en la mano y aún así sin saber dónde estaban”, contó.
En tanto, gran sorpresa se llevó el equipo en Zúrich, Suiza, donde se encontraron nada menos que con el expresidente de la FIFA, Joseph Blatter.
“Nos invitó una chilena que trabaja en la FIFA y terminamos en la casa del mismísimo Joseph Blatter. Nos recibió con una sonrisa y hasta nos contó de un amor que dejó en Chile cuando vino para un Mundial juvenil. ¡Todavía la recuerda! Podría ser portada de un diario: Ex presidente de la FIFA busca amor chileno perdido”.
En tanto, en Puerto Rico todo partió mal con la reserva del auto. “Llegamos con reserva de auto hecha… y nos dijeron que la espera era de 10 horas. Había más de 60 personas reclamando por lo mismo (...) Grabamos con una chilena fanática de Felipe Camiroaga que tenía su casa llena de recuerdos suyos: fotos, cojines y hasta toallas de Felipe. Nos preparó mote con huesillo y hablamos de él como si estuviera ahí. También nos sumergimos en el rollo musical de la isla: fuimos a La Placita, un lugar que se transforma en una fiesta callejera increíble, y a La Perla, el barrio donde se grabó ‘Despacito’ y donde nos dejaron grabar con ciertas condiciones. La energía de Puerto Rico es única”, contó el líder del espacio.
En Bruselas, Bélgica, el equipo tuvo que enfrentar una ola de calor histórica, donde “estuvimos en una recreación gigantesca de la Batalla de Waterloo: cientos de personas vestidas como en el siglo XIX, con cañones, caballos, uniformes, todo. Fue como estar dentro de una película. Y grabamos con un grupo de chilenos que tiene una agrupación de cueca, ¡que enseña a bailar cueca a belgas! Y no es broma: los belgas la aman. Verlos zapatear con entusiasmo fue inesperado y muy emotivo”.