Al ser consultada si quiere mantener un vínculo romántico con Francisco Kaminski, la modelo Camila Andrade fue clara “yo quise con todas mis ganas tener una relación, ya no. Yo creo que esta entrevista marca un antes y un después. Yo lo amé mucho”.
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A “Only Fama” llegó la influencer para hablar sobre su término con el comunicador, y aclarar diversos puntos. Una de ellas fue su ruptura, en donde se dijo que Francisco irrumpió en su departamento bajo el efecto del alcohol, Camila lo confirmó, y partió entregando el contexto.
En diciembre del año pasado, Andrade se sentó a conversar con Kaminski producto de su consumo de alcohol, ya que en contextos sociales “a él se le pasó la mano con el copete y tuve que ponerle un párale, marqué un límite (...) Hubo varios episodios en el que me sentí decepcionada”.
El alejamiento
Al relatar cómo llegó a esta escandalosa ruptura, Camila comentó que le pidió dejar de vivir juntos y tener una relación puertas afuera. “Yo sentí que nunca le agradó mucho esa decisión, pero era tómalo o déjalo. Él efectivamente me ayuda en este cambio de casa”, contó.
A los tres días de que comenzó a vivir sola, la actitud de su pareja cambió. “Empezó a ponerse súper descalificador conmigo, y adoptó una conducta distinta. Esto coincidió con que volvió a tomar, por todo esto que le ha pasado en el último tiempo”, añadió.
El viernes 5 de septiembre, Francisco empezó a tratar mal a Camila a través de mensajes de WhatsApp. Ella terminó bloqueándolo, pero le contestó el teléfono y accedió a tener una conversación con él en su casa, pero le advirtió que no quería descalificaciones. Andrade encontraba que su pareja estaba desequilibrada.
En dicha charla, la modelo sentía que él no la entendía y se dio cuenta que no estaban en la misma sintonía. “No llegamos a nada en esa conversación, entonces me pregunta: ‘¿Entonces, tú quieres que me aleje de ti?’. Por primera vez, tuve la capacidad de decirle que sí. Me dijo ‘nunca pensé que me ibas a decir esto’“.
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Él se terminó yendo del departamento, y Camila preocupada por su salud, considerando que volvió a consumir alcohol, le preguntó cómo estaba. Kaminski no le contestó.
La irrupción de Kaminski en la madrugada
El domingo 7 de septiembre a las 11 PM, él le contestó que estaba bien y pasó el fin de semana con su hijo. Camila decidió no responderle y este silencio lo alteró. “Empezó a pelear solo, (me dijo) ‘ah, no te interesa saber’”, acotó. Ella le terminó contestando que la pregunta se la hizo hace dos días, se tomó una pastilla para dormir y se acostó.
Horas más tarde, a las 2 AM del lunes, Andrade fue despertada por el sonido incesante del timbre de su departamento, era Francisco Kaminski, quien además la estaba llamando por teléfono.
Le abrió la puerta, y el conductor llegó después de haber mezclado pastillas con alcohol. Producto de su mal estado, le dio alojamiento. Ya a la mañana, Camila le preguntó por qué había venido, él le dijo que se quería disculpar.
“Yo le dije: ‘Francisco, yo te puedo perdonar, no tengo ningún problema. Pero, siento que estás mal y tú cambio no es profundo, (tienes una) poca capacidad de mirarte hacia adentro. Yo me veo muy en otra onda después de todo lo que hemos pasado’”, relató.
Al decirle que “estaba en otra”, Kaminski asumió que ya estaba hablando con otra persona. Le aclaró que no se trataba de eso, pero sí que había dado vuelta la página. Al escuchar estas palabras, comenzó un nuevo show. “Me dijo ‘mal agradecida de...’. Yo me quedé en silencio y lo miré. Él se paró enfurecido”, relató.
Ella esperó que terminara y le dijo que se retirara de su casa. Apenas se fue, comenzó a publicar estas historias en donde confirmó su quiebre con Andrade a través de la caja de preguntas de Instagram.
Ese día, Camila dejó constatado expresamente en la conserjería de su edificio que Francisco no podía subir sin autorización.
La nueva llegada de Kaminski a su casa
Esto no paró aquí, venía una “segunda patita”. La modelo recibió un nuevo llamado de su expareja a las 2 AM, esta vez el jueves 11 de septiembre. “Pienso que pasó algo. Contesté, y se escucha un ruido discotequero tremendo, fiesta, música, gente, muy bullicioso. No le pasó nada, y lo dejé ahí. Después de nuevo, llamada, llamada”, contó.
Él la siguió llamando hasta que finalmente le contestó, y recibió una consulta del locutor: “¿Qué onda nosotros?“. Hastiada le dijo que escuchó que ya había iniciado su vida de nuevo, y le pidió que no la volviera a buscar. Le cortó y ahora suena el citófono de conserjería, Kaminski estaba abajo. Ella negó su entrada.
“Lo desbloqueo de WhatsApp para decirle que se vaya. Ahí me empieza a tratar horrible, como nunca antes, con palabras súper fuertes (...) Ahí en ese momento claramente se descontroló”, contó Andrade, quien le pasó su celular a Fran García-Huidobro para que leyera privadamente los mensajes. La “Dama de hierro” dijo que eran insultos de grueso calibre, amenazas y que ella hubiese llamado a Carabineros.
Camila le insistía en que se fuera, y recibió un llamado de conserjería en donde el animador le dijo que le dio permiso por WhatsApp. La modelo le dijo que era mentira, y pidió que se retirara. “Yo le dije esa noche: ‘Francisco, voy a llamar a Carabineros’ y ahí es donde sale, no sé cómo se filtró, le mencioné que iba a tener que poner una orden de alejamiento’. Lo pensé, pero no lo hice”.