El lunes pasado, Fernando Solabarrieta generó revuelo al confesar en ‘El Internado’ que su amistad con el exfutbolista Iván Zamorano había terminado sin que se restableciera el vínculo.
Solabarrieta reconoció que “nos distanciamos hace unos años” y que ya no mantiene contacto telefónico con Zamorano.
Daniella Campos se fue de lengua
Ahora, Daniella Campos, quien participó en el mismo espacio televisivo que Solabarrieta, dio un paso más al apuntar a un “tercer involucrado” en la causa: Nicolás Solabarrieta, hijo de Fernando.
Según Campos, el distanciamiento se originó porque Zamorano le habría prometido a Solabarrieta encargarse del futuro futbolístico de Nicolás, pero la promesa nunca se materializó.
Campos contó que Zamorano habría dicho: “Amigo, no te preocupes, me haré cargo del futuro de Nicolás, mi sobrino”. No obstante, señaló que Nicolás rechazó ofertas en el extranjero esperando ese apoyo que nunca llegó.
“Nico tenía ofertas en ese minuto, en el extranjero, las cuales rechazó esperando la ayuda del entonces amigo. Y esa ayuda nunca, pero nunca llegó”, subrayó.
Ese incumplimiento —según la versión de Campos— provocó que Solabarrieta rompiera totalmente con Zamorano, con quien ya no habla hace cinco años.

