Leonardo Farkas, uno de los empresarios y filántropos más reconocidos del país, sorprendió al revelar que lleva más de una década sin trabajar ni percibir ingresos, dedicando su vida por completo a la filantropía. A sus 58 años, el también músico participó recientemente en su primer podcast, donde abordó aspectos personales y entregó una mirada crítica sobre la realidad que vive Chile en la actualidad.
En conversación con Nicolás Birrell, presidente de la fundación Desafío Levantemos Chile, organización de la que Farkas es uno de sus principales colaboradores, el empresario aseguró que decidió alejarse de los negocios hace once años. “Yo no tengo ingreso, no trabajo hace 11 años, dejé todos los negocios. Estoy dedicado a la filantropía no más“, afirmó, explicando que su motivación ha sido contribuir de manera desinteresada al bienestar de otras personas.
Durante la conversación, Farkas relató que su labor solidaria no se limita a Chile, ya que también ha prestado ayuda en distintos conflictos internacionales, especialmente a niños huérfanos producto de guerras. Para él, la filantropía es una forma de vida que implica entregar recursos, tiempo y oportunidades sin esperar reconocimiento a cambio.
El empresario también recordó parte de su vínculo con organizaciones religiosas y comunidades vulnerables en Chile, señalando que muchas de sus ayudas las realizaba de manera silenciosa. “No lo decía, porque si no, nadie más da”, comentó, evocando acciones solidarias que realizaba junto a su familia, como regalar helados a niños en la playa o celebrar instancias simbólicas para alegrarlos.
Respecto a su familia, Farkas explicó que siempre intentó inculcar a sus hijos la importancia de la empatía, mostrándoles realidades distintas a las suyas. Actualmente, sus hijos desarrollan carreras en áreas como el deporte, la actuación y la literatura en el extranjero.
Finalmente, el filántropo expresó su preocupación por el Chile actual, apuntando a la falta de transparencia y al aumento de la desconfianza. “A los que dan siempre los critican”, lamentó, asegurando que muchas veces se cuestionan las intenciones de quienes ayudan. Además, comparó la seguridad de años anteriores con la situación actual, señalando que hoy percibe un país más inseguro y distinto al que conoció.

