Este matrimonio cumplió con dos dichos comunes: “El amor es ciego”, se casó con una olla arrocera, y “el amor no es eterno”, se separó a los cuatro días.
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Esta descabellada historia comenzó cuando Khoirul Anam, quien vive en Java, Indonesia, publicó en su cuenta de Facebook fotografías de su matrimonio. Un post que de inmediato se volvió viral.
¿La razón? La novia... Pues se trató de una olla para hacer arroz.
En las imágenes que posteó Anam, de hecho, se aprecia al artefacto luciendo un velo blanco en plena ceremonia de matrimonio.
Anam justificó su decisión porque el artefacto cumplía con todos los requisitos que estaba de una pareja: ser justa, tranquila, obediente, que no hablara mucho y que supiera cocinar.
Separación
Pero no pasó mucho tiempo para que la pareja se rompiera. Cuatro días después el propio Anam confirmó el quiebre definitivo de la relación y anunció los trámites de separación.
“Mi decisión es clara, determinante de hecho, pero ya lo he decidido: no hay pareja perfecta”, aseguró el frustrado marido.
La pronta ruptura de la pareja impactó a las redes sociales. Ahora se especula que Anam mantiene otra relación con algún otro artículo electrodoméstico.
