Se acerca el verano, y estos últimos meses del año nos empieza a entregar un clima más cálido, dando paso a utilizar un mayor tiempo el jardín de nuestra casa. Y precisamente esto también crea la necesidad de cuidar más la hidratación de dicho espacio. Queremos plantas verdes y hermosas, no secas.

Uno de los artículos que debemos tener siempre a mano, son las mangueras para el jardín, las cuales pueden parecer todas similares, pero hay que tener en cuenta que existen distintos tipos. Por lo tanto, el primer paso será determinar si el uso será moderado, intenso o muy intensivo, el caudal que va a transportar y la presión del agua. Existen ciertos consejos para tener más claro el panorama de la manguera adecuada.

Eligiendo una buena manguera

Para elegir la longitud de una manguera podemos medir la distancia desde el grifo hasta la parte más lejana de nuestro jardín y comprar una de esa medida o ligeramente más larga. Se debe considerar que a mayor longitud de manguera la presión del agua será menor. Las medidas más habituales son 15 y 20 metros. Por norma general, necesitarás una manguera espiral o manguera extensible en un espacio exterior de hasta 30 metros cuadrados.

Las mangueras tienen diferentes diámetros, por ejemplo 1/2, 3/4 y 1 pulgadas, donde las de menor diámetro, son más adecuadas para regar macetas o áreas pequeñas, mientras que las de mayor diámetro son para zonas más grandes. “Actualmente tenemos un amplio mix de mangueras de PVC, entre ellas dos líneas diseñadas especialmente para riego doméstico, pero que también son compatibles con diversos usos caseros o para transporte de agua en general. Ambas son ligeras, flexibles, resistentes, disponibles en varios modelos, diámetros y longitudes” asegura Andrea Arteaga, Subgerente de Marketing de Dvp.cl.

No desperdiciar el agua

Lo segundo, es precisamente ver alternativas para que el gasto de agua no sea excesivo. Una manera es “reciclar” aguas servidas, por ejemplo, de los enjuagues de lavado de tu lavadora de ropa.

Para esto, basta con que conectes la manguera que desecha las cargas de agua a un estanque donde podrás almacenar agua para regar. Si logras ubicarlo en altura, por acción de la gravedad y de la gran cantidad de agua almacenada, el agua fluirá por la manguera para regar tu jardín.

Evitar el “exceso de agua”

No solo por gastar un recurso preciado. Si no que hay plantas que no requieren de una hidratación diaria. Lo más importante es que conozcas las especies de plantas que habitan tu jardín y sus necesidades. Si tras comprar algunas plantas olvidaste sus nombres, hoy la tecnología te puede ayudar. Existen aplicaciones que, a través de la cámara de los teléfonos, te ayudan a reconocer la especie en cuestión.

Algunas de ellas son: Plantsss, Gerente de Jardín, Plant Care Reminder, Plant Net, Cómo cuidar plantas y jardines y Maceto Huerto. Dependiendo de la aplicación, te dirán que especie es, si está en buen estado o no, que necesidades tiene, si requiere más o menos agua, si necesita luz o sombra y más. Un buen aliado para este verano y la jardinería. Manos a la obra.