Cuando se menciona alguna molestia de espaldas, automáticamente se entiende que se trata de una de las más incómoda que puede sufrir el cuerpo humano. Muchos lo relacionan por la mala postura, falta de movimientos y ejercicios, pero a esto también hay que agregarle un complemento no vivido años atrás: el exceso de uso de dispositivos tecnológicos.
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El especialista en Neurocirugía y terapia especial del dolor, Nikolai Rainov, comentó recientemente al respecto para la agencia de noticias alemana Deutsche Presse-Agentur (DPA) que: “Estar sentado durante un largo tiempo, ya sea erguido o encorvado, provoca una tensión unilateral que es perjudicial para la espalda”.
Así mismo continuó explicando que “es mejor ir cambiando la posición en la que se encuentra sentado y pararse de manera regular, para permitirse libertad de movimiento porque la espalda se ve beneficiada por la variedad de posturas”.
Cuidados y protección
Según el doctor Rainov la paciencia y la disciplina son fundamentales para poder prevenir los dolores de espaldas. Es importante trabajar con ejercicios físicos y de relajación la musculatura de la zona afectada.
La caminata diaria, nadar por lo menos tres veces a la semana o algún ejercicio destinado para la espalda supervisado por un especialista o entrenador personal, pueden ser algunos de los ejercicios con fácil alcance que de seguro mejorará todo y evitará las molestias.
“Cuando la espalda tira y pincha de forma desagradable, muchas personas doloridas tienden a protegerse quedándose quietas. Pero justamente hay que hacer lo contrario, o sea ejercicio, que suele ser muy beneficioso para la espalda. La actividad física puede aliviar frecuentemente las tensiones”, aseveró Nikolai Rainov
Igualmente es recomendable que, si los dolores son intensos y no mejora con estas sesiones, no perder tiempo y dirigirse de inmediato a doctores especializados en la materia para realizar estudios más exhaustos y determinar el porqué de los dolores.
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Pandemia y Home office
Como todo en el planeta, el Covid-19 cambió totalmente el día a día. Debido a la pandemia, la modalidad de trabajo en casa se hizo habitual, obligando a las personas a pasar más horas de las debidas sentadas en sus casas para poder desarrollar sus trabajos.
En la mayoría de los casos no se cuenta con las sillas adecuadas para pasar largo tiempo sentados, lo que hace que la postura sea la incorrecta y acelere los dolores de espalda. Otra de las razones es que, por el encierro obligatorio por cuarentena, no se tenga ni el tiempo ni el espacio para poder practicar las técnicas mencionadas de fortalecimiento de los músculos afectados.
“Trabajos que nos exigen muchas horas frente a la computadora y/o hacer esfuerzos que comprometen a la columna, traen efectos negativos en nuestra salud, sin importar la edad de la persona”, concluyó el especialista en Neurocirugía.
