Sigue la gran pelea entre el gobierno de los Estados Unidos y la reconocida red social, TikTok. Esta vez el centro de la tormenta es el estado de Utah, quien mediante a sus representantes gubernamentales emitieron una demanda en contra de la empresa de procedencia china por presuntamente causar adicciones a los niños, niñas y adolescentes, además, de impactar negativamente la salud mental al aumentar los riesgos de padecer depresión y ansiedad.
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La respuesta por parte de los ejecutivos de TikTok no se hizo esperar y desde dicho entorno se aseguró que la empresa está trabajando arduamente para priorizar la seguridad de los menores de edades. Además, insistieron que la aplicación ya cuenta desde meses atrás con limitaciones de uso que pueden ser aplicada por padres y representantes.
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“TikTok tiene diferentes herramientas, incluyendo un límite de tiempo automático de 60 minutos para usuarios menores de 18 años y controles parentales para cuentas de adolescentes, para proteger a los chicos. Seguiremos trabajando para mantener segura a nuestra comunidad, afrontando los retos de todo el sector”, expresó Alex Haurek, vocera de TikTok.
Adicción y comportamientos violentos
Los motivos de las acusaciones indican que la aplicación de videos cortos insiste en llamar la atención de los usuarios jóvenes con sus algoritmos que cuentan con características de diseño muy manipuladoras, creando así hábitos adictivos y poco saludables entre los consumidores.
El fiscal general del estado de Utah, Sean Reyes, afirmó en una conferencia de prensa en la que se anunció la presentación de la demanda, que su máxima prioridad es proteger a los niños.
Por su parte, el gobernador Spencer Cox agregó: “Estamos cansados de que TikTok mienta a los padres de los menores en Utah. Estamos cansados de que nuestros hijos pierdan su inocencia, e incluso sus vidas, adictos al lado oscuro de las redes sociales”.