La Navidad, una época de celebración y reuniones familiares, trae consigo momentos de alegría compartidos alrededor de deliciosos platillos. Sin embargo, es importante tener precaución al consumir comida recalentada durante estas festividades, ya que algunos riesgos asociados pueden afectar la salud de los comensales.
PUBLICIDAD
Con el ajetreo de las preparaciones navideñas, es común que sobre abunde comida, y la práctica de recalentarla para aprovecharla puede ser una tentación. No obstante, la calidad y seguridad de los alimentos recalentados deben ser consideradas con detenimiento.
Le puede interesar: ‘Regalazo’ de Navidad: Presidente Petro decretó dos bonos adicionales para salarios de servidores públicos
En primer lugar, el proceso de recalentamiento puede favorecer el crecimiento de bacterias, especialmente si la comida ha estado a temperatura ambiente durante períodos prolongados. Por ello, es esencial refrigerar adecuadamente los restos de comida para minimizar el riesgo de contaminación.
Además, es fundamental utilizar métodos de calentamiento adecuados para garantizar la uniformidad de la temperatura en toda la comida. La presencia de ciertos ingredientes puede aumentar la susceptibilidad a la proliferación bacteriana. Por lo tanto, es recomendable evitar el recalentamiento de alimentos que contengan ingredientes propensos a la contaminación.
Aunque la tradición dicta que ciertos platillos navideños, como sopas y guisos, mejoran con el tiempo, es esencial manejarlos con cuidado.
La seguridad alimentaria debe ser una prioridad durante las festividades navideñas. Además, ayuda a resaltar los pasos necesarios para disfrutar de las delicias navideñas sin comprometer la salud. Al seguir prácticas adecuadas de manipulación y almacenamiento de alimentos, es posible disfrutar de una Navidad sin riesgos y con platos deliciosos y seguros para todos.
PUBLICIDAD
¿Cuánto tiempo puede durar la comida recalentada?
Es crucial tener en cuenta que el proceso de descomposición de los alimentos está siempre presente, y el recalentado no es la excepción.
Según la Mayo Clinic, las sobras pueden ser almacenadas en el refrigerador durante un período de 3 a 4 días. Sin embargo, a partir de ese lapso, las posibilidades de intoxicación alimentaria se incrementan considerablemente. En este intervalo, existe la probabilidad de que agentes patógenos contaminen los alimentos, subrayando así la importancia de respetar los tiempos de almacenamiento recomendados.
