Mireya tiene su pareja y desde hace un tiempo tener relaciones sexuales ya es como algo rutinario. Ha abordado el tema, con mucha pena, con varias de sus amigas quienes la han aconsejado de mil maneras.
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Pero sólo una le habló de experimentar con ‘Kinky’, termino que le sorprendió e hizo reír a más de una en una reunión a la que asistió Mireya y en la que se sintió como una total desconocida.
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Como las mujeres no nos detenemos ante nada, Mireya decidió investigar a fondo que significaba ‘Kinky’ y como podía ayudarla para mejorar su intimidad con su pareja.
Según el diccionario de americanismos, la palabra en inglés ‘kinky’ se refiere a “la persona, que posee o practica preferencias sexuales no convencionales, como el fetichismo o el sadomasoquismo”.
Varias de las consideraciones que las amiga de Mireya le plantearon en la reunión es que esa práctica es divertida, traviesa y diferente.
Así que Mireya decidió hacer una búsqueda en internet, hablar con expertos en la materia y entender que una nueva experiencia sexual, alejada de lo convencional, podía aumentar el placer en la relación sexual con su pareja.
De qué se trata el termino ‘kinky’
La revista Nosotras entrevistó a la psicóloga y sexóloga, Adriana García, quien indicó que el termino ‘kinky’ se refiere a la persona que tiene encuentros sexuales ‘kink’, es decir, que se mantienen alejados de la rutina incluyendo algunos cambios de manera constante para que las personas o las parejas no se aburran.
“Estos cambios pueden ir desde un cambio de espacio hasta un cambio de posiciones o la inclusión de juguetes sexuales”, explica la experta.
Destaca que la idea es hacer divertido el momento del acto sexual y evitar lo rutinario. “Por ejemplo, si siempre tienen relaciones en tu casa, háganlo en un hotel, es espacios liberales o en el coche, evitando situaciones que atenten contra la seguridad e integridad de la pareja”, destaca la experta, al tiempo que añade que el objetivo final es “no sólo el placer, sino también el reconocimiento de la pareja y la relación”.
Cómo se práctica ‘kinky’
Esta no es una práctica que se divulga con naturalidad y uno de los acercamientos que hubo al sadomasoquismo o a los cambios en la forma de lograr el placer, fue con los libros “50 sombras de Grey” que fue llevada al cine.
Allí Christian Grey, el protagonista de la saga, practicaba BDSM (el acrónimo de Bondage-Disciplina-Dominación-Sumisión-SadoMasoquismo).
Explican los expertos que esta serie escrita por E.L. James ayudó a visibilizar esta práctica que, para ese momento seguía siendo tabú, como un recurso para conseguir placer con tu pareja entendiendo el sexo desde un lente más amplio y, para quienes la practican, mucho más divertido.
Precisa García que todos en algún momento “hemos practicado BDSM, a través de una palmadita, alguna orden que le hayamos dado a la pareja, atándonos de manos, etc”.
Recomendaciones para iniciar ‘kinky’
Entre las recomendaciones que hace la sexologa para evitar lesiones en esta práctica está:
- Ser cuidadosos en el acto sexual y si es con juguetes aun más.
- Debe hacer con consentimiento mutuo pero la mujer siempre tendrá la última palabra.
- Lo ideal es comenzar poco a poco y determinar reglas desde el principio, y donde la comunicación debe ser constante.
- El BDSM es una de las prácticas diferentes más buscadas, no significa que son exclusivamente ‘kinky’, es decir, según Adriana, el sexo ‘kink’ puede incluir BDSM o no.
Tres prácticas que te pueden ayudar
Para experimentar esta práctica y lograr una compenetración con tu pareja, la experta enfatiza que hay que probar con estas tres prácticas:
- Dirty talk: Durante el acto sexual, decir todo aquello que les viene a la cabeza. Algunas cosas podrían encender a tu pareja. Eso sí, deben tener claro que lo se diga en ese momento, se debe considerar como una fantasía. No tomarlo en serio, ni personal a la hora de vestirse de nuevo.
- Bondage. Esta es práctica que tiene muchos niveles de complejidad y consiste, básicamente, en atar a tu pareja. Lo excitante de este juego son los roles donde la persona que ata es dominante y la persona que es atada es sumisa. Este acto debe ser consensuado y realizado con seguridad.
- Hacerlo en lugares públicos. En esta práctica la adrenalina va a mil por tener sexo en lugares considerados “prohibidos” y eso hace que aumente la líbido. Estos lugares puedes ser el baño de un restaurante, la orilla de la playa, en tu coche en un estacionamiento.