El mundo está muy complicado, la pandemia de covid lo dejó en claro y para muchos gobiernos marcó un antes y un después. Ahora la consigna para muchos es prever. Austria, sin más lejos, inició una campaña para preparar a su población para un apagón de energía eléctrica indefinido.
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Para las autoridades austriacas, un corte de energía de grandes proporciones no es una especulación: ocurrirá, la única duda es cuándo.
Así lo manifestó la ministra de Defensa austríaca, Klaudia Tanner, en abril de este año, cuando aseguró que “la cuestión no es si habrá un gran apagón, sino cuándo”, señala la agencia alemana DPA.
El gobierno de Viena llamó a su población a acopiar comida no perecible, agua, pilas, velas, combustible y artefactos de primera necesidad.
Las autoridades solicitaron a la gente a imaginar varios días sin internet, cajeros automáticos, teléfonos móviles, semáforos, computadoras, transporte público, entre otras cosas.
Dos semanas de camping
Mientras que el ejército austríaco recomendó a la población tener en casa los elementos necesarios para hacer frente a dos semanas de camping.
El teniente coronel Pierre Kugelweis aseguró a la agencia EFE que era fundamental tener arroz y pastas para hacer frente a más de una semana, junto con agua, dinero en efectivo y un balón de gas.
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Esta temor cada días más reciente a un apagón sostenido responde a los inesperados efectos del cambio climático que se han visto en Europa en los últimos meses.
Los efectos de altas jornadas de calor y luego extremo frío han sido mucho mayores de las esperadas por los científicos, lo que aumenta el temor a un “blackout” generalizado en el Viejo Continente.
