Carol, hermana de Doris Andaur, presunta víctima en 2016 de su expareja y funcionario de la PDI, Bastián Guzmán, detenido y a la espera de su formalización en el Juzgado de Garantía, reveló que en un encuentro fortuito que tuvo con el acusado este le habría confesado su culpabilidad en la muerte de la joven de 24 años.
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En lo que resultó ser un vuelco total en las investigaciones respecto de la muerte de Doris Andaur, esta semana fue detenido el funcionario activo de la Policía de Investigaciones, acusado de eventualmente haber alterado la escena del crimen, y quien en sus primeras declaraciones del caso había afirmado que la mujer se había suicidado con el arma de servicio del efectivo policial.
Fue en un despacho en el matinal “Mucho Gusto” de Mega donde la hermana de la víctima contó detalles de un juicio que, aseguró, esperaban hace años.
Una nueva esperanza de justicia
“Estamos esperanzados. Gracias a Dios tuvimos un fiscal bien diligente, se notaba apasionado con su trabajo y es lo que le falta a Chile ahora”, apuntó Carol, quien explicó que en al momento del disparo que acabó con la vida de su hermana el efectivo de la PDI y conviviente de la joven “no llamó a nadie. Él no abrió la puerta a los vecinos. Nunca nos informaron a nosotros como familia que habíamos perdido a mi hermana, hubo una negligencia de la policía y fiscalía. Nosotros nos enteramos al otro día y por terceros”.
En perspectiva, la hermana de Doris aseguró en el matinal del canal privado que desde un principio “todo apuntaba a que mi hermana no se había quitado la vida. (El imputado) tenía restos de pólvora y esos fueron muy periciados”.
“Nosotros como familia teníamos sentimiento de que él no llegaba a juntas familiares, o que hacía cosas medias machistas delante de mi hermana, así que siempre estuvo la sospecha de que él podría hacer algo malo”, señaló.
Reconocimiento de culpabilidad
Con esos antecedentes del comportamiento de Guzmán, más un episodio en el que quedó preocupada por Doris porque el funcionario de la PDI le arrebató un billete de sus manos, con el la víctima le pagaría una deuda a su hermana, fue que comenzaron a sospechar del efectivo policial.
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“Un día mi hermana me devolvió una plata delante de él y cuando me la estaba pasando, él toma el billete y se lo guarda en su billetera. Eso fue como cuatro días antes que mi hermana falleciera. Quería hablarlo con ella y no alcancé. Ahí yo dije: ‘¿qué está pasando?’ Pero mi hermana nunca lo habló, a veces se me perdía un poco y no me contestaba el teléfono durante el día”, explicó.
Consultada por las nuevas pericias que apuntarían a un homicidio más que a un suicidio, Carol Andaur profundizó en un encuentro casual que tuvo con el acusado en el Metro de Santiago, lugar donde el PDI le habría confesado ser autor del crimen. “Sí, la maté y qué”, le habría reconocido Guzmán, según declaraciones de la hermana de la víctima.
“Tenemos antecedentes de que consumía drogas, así que ese era el policía que teníamos (...) él se mostraba de una forma, pero con mi hermana era terrible. Espero por ahora de la PDI que retiren sus dichos, que nos causaron tanto dolor (...) Ojalá que ahora salgan a hablar y que den la cara frente a esto, porque no solo nosotros necesitamos una disculpa de la institución, sino que todo el país”, finalizó.
