Mucho se especuló durante las últimas semanas que los resultados de la segunda vuelta presidencial iban a estar en manos del excandidato del Partido de la Gente, Franco Parisi, tras los sorpresivos votos que tuvo a su favor en la primera vuelta, donde se impuso en la mayoría de las regiones del norte.
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Sin pisar Chile, por una orden de arraigo por deuda de pensión alimenticia, Parisi logró el tercer lugar de las preferencias en la primera vuelta, especialmente gracias a su buen desempeño en el norte: incluso, en Antofagasta logró la primera mayoría con un 33,98% de los apoyos.
En ese contexto, tanto José Antonio Kast (Frente Social Cristiano) como Gabriel Boric (Apruebo Dignidad) empezaron acercamientos al PDG de cara al balotaje: el abanderado del Frente Social Cristiano participó en el programa web BadBoys y ganó por amplia ventaja la consulta de los militantes, mientras que el aspirante de Apruebo Dignidad suspendió su conversación con Parisi y lo emplazó a pagar la millonaria pensión de alimentos que adeuda a sus hijos.
Las discrepancias entre el diputado y el economista terminaron con este último acusando que el programa del militante de Convergencia Social era “hambre para Chile” y señalando que sus ideas “sólo beneficiarán a sus amigos”.
Sin embargo, la discordia no influyó en el electorado del norte del país y Boric terminó imponiéndose en cuatro de las cinco regiones de la zona. Resultó victorioso en Arica y Parinacota (50,61%), Antofagasta (59,76%), Atacama (65,47%) y Coquimbo (63,28%).
Kast solo logró el triunfo en Tarapacá, con un margen de 51,29% contra el 48,71% de respaldo que logró el futuro Presidente.
