En Escocia, un bebé murió luego de tragarse la pila de uno de sus juguetes.
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Según rescata Mirror, Hughie McMahon, de apenas un año, ingirió una pila del tamaño de un botón (LR44) que, se cree, estaba dentro de uno de sus peluches.
En un principio, el menor se atragantó con el objeto y fue llevado a urgencias, donde recibió atención médica.
Sin embargo, tras ser llevado al recinto de salud, los médicos descubrieron que -producto de haber ingerido la batería- su sangre se “había vuelto ácida” y que no coagulaba.
Adicionalmente, descubrieron que se produjo un agujero en su corazón, por lo que el menor no podría recuperarse.
Los padres del bebé tomaron la difícil decisión de desconectar a su hijo de las máquinas, ya que eran lo único que lo mantenían con vida.
