Este viernes, la voluntaria Valentina Astudillo (25) se convirtió en la mártir 327 de Bomberos tras fallecer mientras se encontraba de gravedad en la Mutual de Seguridad. La joven pasó 19 días internada en el hospital luego de sentirse mal en medio de un “acto de servicio”.
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El 27 de enero, Valentina acompañó a sus compañeros de la Cuarta Compañía de Padre Hurtado a combatir un incendio en unos pastizales de dicha comuna. En medio de las labores de control de las llamas, se comenzó a sentir mal.
Gonzalo Rojas, tío de la fallecida, afirmó a Las Últimas Noticias que su sobrina inhaló químicos nocivos durante el siniestro.
“Eso derivó en que ella se sintiera mal; luego de eso cayó al hospital y de allí no salió más. Estuvo en coma inducido y respirador mecánico”, explicó.
“En un momento estuvimos muy felices, porque Valentina presentó una evolución positiva. Eso fue como en el día 13 de hospitalizada, pero luego decayó. Estuvo consciente algunos días, pero sin poder hablar. Yo le tocaba la mano, le hablaba y ella te sentía. Incluso le caían lágrimas cuando entraba su papá o su pololo a verla”, comenta.
“Su pasión era ser bombera. Tenía mucha vocación de servicio. No lo hacía por figurar: ella se sentía cómoda consigo misma ayudando. Era como un don que tenía. Era feliz ayudando a las personas”, destacó Rojas sobre las razones detrás de su voluntariado.
Soñaba con ser doctora
Si bien Valentina estudiaba para ser Técnico en Enfermería, congeló la carrera para enfocarse en su verdadero sueño: estudiar medicina. Es por esto que, mientras preparaba esta meta, se desempeñó como cajera en un supermercado de Maipú, además de continuar su labores de bombera, institución que integraba desde 2018.
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Y en las pruebas para ingresar a la Cuarta Compañía de Padre Hurtado, en septiembre de 2021, encontró el amor, al conocer a quien sería su pololo, Ariel Hillmer.
El joven recordó a LUN cómo era su novia, asegurando que “vibraba siendo bombera. Se emocionaba cuando había que tripular los carros o atender una emergencia. Fuera un rescate, un accidente o un incendio; le gustaba poder ayudar a la gente”.
“Valentina era muy alegre. Una persona sensible y empática: le gustaba la naturaleza y los animales. Tenía mucha conexión con las cosas sencillas de la vida. Su sueño era estudiar Medicina: Se estaba preparando para dar la PDT al final de este año”, añadió el joven.
