Se votaba, pero las miradas iban y venían. Se sabía que se estaba cumpliendo con el mandato y el reglamento, se había debatido el segundo informe de la Comisión de Sistemas de Justicia y ahora había que aprobar o rechazar en particular, pero algo andaba mal. La idea de que se estaba perdiendo el tiempo al votar nació de una facción, más a la derecha, pero terminó convenciendo -o haciendo aceptar el error- a todos.
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La polémica en la jornada de jueves de la Convención Constitucional había comenzado antes, cuando la mesa del Pleno informó que abriría en unos días más un período extra para la presentación de normas transitorias, que en este caso, no eran pocas. En ese momento, nadie reclamó.
Tarde, en la noche, se rechazaron dos de esas normas transitorias: el fin de la Justicia Militar después de que finalice su última causa vigente, y también que se instale un Tribunal de Ejecución de Penas, que bucaba resguardar los derechos de los condenados.
Hasta que alguien hizo la pregunta correcta: ¿En ese período extra, se pueden volver a proponer estas mismas normas? Tal como se había informado poco antes, la respuesta fue sí.
Rodrigo Álvarez observó entonces: “No tiene sentido que votemos”. Marcela Cubillos agregó: “Se está dando algo curioso. Sólo se está votando para que se aprueben las normas; si se rechazan, se repondrán después. No hay dos opciones, sólo una, aprobar”.
Varios constituyentes, entre ellos Fernando Atria, intentaron no darle mayor curso al reclamo que, a esa hora, venía sólo de la derecha. “No reclamaron antes, lo que demuestra que lo tenían planificado”, dijo Atria. Hasta que vino la pregunta que lo detuvo todo: Carol Bown consultó “¿También se pueden proponer después normas que contradigan las que se aprueben acá?”.
La respuesta, otra vez, fue positiva desde la testera.
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Los pocos convencionales presentes (el resto estaba vía Zoom) se empezaron a pasear, a conversar, al punto que la transmisión oficial se cortó. Algo así como un corte comercial.
De esa forma, en secreto por casi una hora, se acordó por unanimidad proponer al Pleno posponer la votación de las normas transitorias de este informe y sólo considerarlas en el momento en que se abra aquel período especial; eso sí, excluyendo las que ya fueron objeto de votación.
El error se entiende asumido por la Convención, pues también se decidió aplicar el mismo criterio en los sucesivos informes que las comisiones despachen al Pleno.
Los convencionales aprobaron ampliamente la moción, así como retomar la sesión de votación el próximo martes.
El Sistema de Justicia que se seguirá votando ese día, sólo en su articulado permanente, propone la opción de una justicia indígena, que los tribunales sean revisados por un Consejo externo; modificar la Corte Suprema; establecer salas especializadas en violencia contra la mujer; el término de las concesiones en cárceles y eliminar el arbitraje de empresas con el Estado.
Aprueban el indulto
También hubo otra polémica más temprano, cuando en el trabajo de comisiones, Sistemas de Justicia aprobó en general la iniciativa popular de norma que proponía la “libertad de los presos políticos de la rebelión popular”.
El texto concede un perdón a quienes estén imputados por delitos como desórdenes, incendios y homicidio consumado o frustrado, idea que tuvo el apoyo de más de 17 mil personas.
La propuesta incluye a jóvenes que estén siendo investigados -no condenados-, y excluye a miembros de las Fuerzas Armadas, de Orden y funcionarios de cualquiera de los organismos y poderes del Estado.
Se incluye a quienes “hayan sido imputados o condenados por hechos acontecidos desde el 7 de octubre de 2019″.
La norma recién inicia el proceso: avanzó hacia la discusión en particular de la comisión y si allí es aprobada, pasa al Pleno.