En La Plata, Argentina, un comisario de la policía bonaerense fue detenido tras ser acusado de realizar maniobras irregulares para cobrar horas extras en su trabajo.
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Según rescata Clarín, el comisario tenía una particular táctica, y es que utilizaba a un civil al que “disfrazaba” de policía, para que realizara algunas tareas adicionales y así, él pudiese cobrar las horas extras.
Cabe señalar que estas extensiones horarias se pagan cuando instituciones como bancos, organismos públicos o comercios, requieren de una mayor dotación policial en determinadas circunstancias, por lo que las respectivas unidades envían uniformados de forma extraordinaria para cumplir con el resguardo solicitado.
El uniformado le entregaba un supuesto chaleco antibalas, el cual estaba relleno con espuma y una pistola a balines, sin embargo, parecía un auténtico agente de la fuerza de seguridad provincial.
El funcionario involucrado está detenido por el delito de “estafa e incumplimiento de los deberes de funcionario público”. En tanto, el “señuelo” usado por el comisario, fue detenido durante un procedimiento la noche del miércoles.