Los ocho años que Gabriel García Márquez residió en Barcelona le dieron una cercanía con la cultura e idiosincracia catalana que esparció la fiesta en las ramblas el día de su consagración universal en Estocolmo y trascendió a la muerte tan venerada del patriarca del realismo mágico. En diciembre se cumplen 40 años de aquel día en que el novelista colombiano subió con desenfado al estrado del Premio Nobel vestido con guayabera y pronunció un discurso reseñando las grandezas y penurias de los habitantes de América tras la llegada del feroz conquistador español, lo que motiva ahora la creación de una monumental biblioteca levantada en su honor en el distrito de Sain Martí.
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La colosal obra del autor de Cien Años de Soledad, El Coronel no Tiene quien le Escriba, Crónica de una Muerte Anunciada y Memorias de mis Putas Tristes, entre tantas, lo transformó en un ícono de la lengua castellana que hoy se celebra con la inauguración de un edificio de 4mil m2 y seis plantas, diseñado por los arquitectos Elena Orte y Guillermo Sevillano y concebido en su diseño como un conjunto de libros apilados cuyos pliegues se advierten desde el exterior. Su costo: 12 millones de euros.
Las instalaciones acogen una radio comunitaria bautizada como Maconda en honor al pueblo al que dio vida GGM a partir de su natal Aracataca colombiano, a un paso de Santa Marta. En su entorno resalta una escultura de Gabo –de tono mate- donada por instituciones del Caribe, envuelta en 5 mariquitas estampadas en bronce, como las mariposas amarillas que perseguían al mítico personaje de Mauricio Babilonia…
El boom de la literatura latinoamericana
Según los críticos de libros, el idilio de los escritores latinoamericanos con Barcelona ha sido constante, desde que las editoriales de Cataluña impulsaran el histórico boom literario de los años 60 y 70.
En ese marco, en la flamante biblioteca GGM se realizará el Festival de Literatura Latinoamericana KM América, que reunió del 16 al 19 de junio a 22 destacados escritores de once países. Al fin, otra comprobación de la herencia vital de García Márquez, uno de los escritores más leídos del planeta: sólo de Cien Años de Soledad se han vendido más de 40 millones de ejemplares en más de 30 idiomas diferentes. Un personaje entrañable que coleccionaba más discos que libros, y que alguna vez confesó que para dar vida al realismo mágico de tantas novelas se inspiraba en la música de los preludios de Debbie See y en La Noche de un Día Agitado, de Los Beatles…
“No es verdad que las personas dejen de perseguir sueños porque se hacen viejas, sino que se hacen viejas porque dejan de perseguir sus sueños... La vida no es la que uno vivió, sino la que uno recuerda y cómo la recuerda para contarla”.
<b>Gabriel Garcia Márquez</b>
