Con un procedimiento abreviado y una pena de poco más de 18 meses de cárcel, pero con el beneficio de la remisión condicional, terminó el caso por maltratos a un menor de edad en contra de Johanna Bustos, educadora y exfuncionaria del hogar Nido de Hualpén, en la región del Bío Bío.
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La investigación constató que la mujer arrastró del brazo a un niño y luego lo lanzó a una habitación cuando trabajaba en el recinto. Mediante un procedimiento abreviado, se determinó que la pena a cumplir es de 541 días de libertad vigilada.
La imputada aceptó el acuerdo propuesto por la Fiscalía, evitando un juicio oral y una sanción que podía haberla llevado a la cárcel. Si bien la acusación inicial pedía una pena de 3 años y un día de prisión por el delito de apremios ilegítimos, la irreprochable conducta anterior y la aceptación del abreviado por parte de la implicada llevaron al ente persecutor a ofrecer el acuerdo y rebajar la sanción.
Los hechos se remontan a marzo de 2019, cuando las cámaras de seguridad del hogar Nido registraron el momento en que la educadora tomó del brazo a un niño de tan sólo ocho años de edad y lo arrastró por el suelo hasta lanzarlo al interior de una habitación.
