El partido Amarillos por Chile presentó su declaración de principios en la que busca presentar sus ideales ante el espectro político, ellos buscan posicionarse como un importante actor del centro. En el texto presentado, el cual fue adelantado por Ex-Ante, ellos manifestaron su rechazo a la violencia y a la cultura de la cancelación, una postura a favor de las reformas por sobre las revoluciones y las fuerzas públicas.
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En la declaración, se caracterizaron por ser un movimiento que nació a causa del anterior proceso constituyente, ellos expresaron su rechazo por la propuesta de Constitución que a su juicio, “carecía de las características necesarias para unir a los chilenos y chilenas, que si bien contenía normas rescatables presentaba graves errores y problemas para el devenir democrático de Chile”, declararon.
A pesar de reconocer su nueva participación en el escenario político, se consideran como los herederos de la Concertación, “no somos un partido sin historia, nos consideramos continuador, ante los nuevos desafíos históricos, de lo realizado por la Concertación de Partidos por la Democracia”, afirmaron.
Ellos manifestaron su apoyo al uso de las fuerzas públicas de organismos legítimos, ya que su ausencia perjudica a sectores más vulnerables. Rechazaron a la violencia en todas sus formas, y las expresiones revolucionarios como motores del cambio, ellos afirmaron que el camino son las reformas.
Además, manifestaron su desagrado por la “cultura de la cancelación”, ellos señalaron que “es uno de los peligros más preocupantes para el desarrollo y fortalecimiento de la democracia y el pensamiento libre, especialmente en las universidades, el mundo de la cultura y la política de nuestro tiempo. Debemos hacer todos los esfuerzos para erradicarla y enfrentarla con decisión. Su práctica es una expresión inquisitorial de intolerancia y fanatismo, los antivalores por esencia de las ideas que fundan nuestro movimiento”.
