Este miércoles se registraron concentraciones de personas pro Bolsonaro frente a las puertas de los cuarteles en Sao Paulo, Brasilia y Río de Janeiro, para exigir una intervención militar contra el presidente electo, Luiz Inácio Lula da Silva.
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El llamado a manifestarse surgió a través de redes sociales por parte de grupos ultraderechistas que apoyan a Jair Bolsonaro y que no reconocen el triunfo en las urnas de Lula.
Esto se da paralelo a las protestas de camioneros –con el mismo objetivo– bloqueando las carreteras de Sao Paulo. Eso sí, estas manifestaciones han bajado, luego de que Jair Bolsonaro las desautorizara y determinara que el Gobierno iniciara el proceso de transición con el equipo de Lula.
Según la Policía de Carreteras (PRF), este miércoles, festivo en Brasil por el Día de los Muertos, aún persisten 167 bloqueos de camioneros, de los cerca de 500 que había el pasado lunes.
Bolsonaro se refirió a la derrota el martes, pero mientras estuvo en silencio, sus simpatizantes más ultras iniciaron el movimiento que exige a las Fuerzas Armadas un golpe militar, que “clausure” el Parlamento y la Corte Suprema pero mantenga al actual gobernante en el poder.