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Conozca las tres cosas que pueden herir los sentimientos de tu perro

Los perros pueden experimentar cinco emociones principales que experimentamos los humanos: miedo, ira, disgusto, alegría y tristeza.

Los animales tienen emociones según explican los veterinarios | Foto: Golden Retriever
Los animales tienen emociones según explican los veterinarios | Foto: Golden Retriever

Un video que explica tres cosas que pueden herir los sentimientos de tu perro, incluido apresurarse en sus caminatas diarias, se ha vuelto viral en las redes sociales.

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El clip viral, compartido en TikTok por Buddysmartz a principios de marzo y que presenta a Buddy, el golden retriever, afirma que tres acciones particulares de los dueños de mascotas pueden herir involuntariamente los sentimientos de su bebé peludo más leal.

“Las 3 cosas que pueden herir los sentimientos de tu perro”, dice una leyenda.

  1. Apurar a su perro en una caminata: a los perros les encanta tomarse el tiempo para olfatear mientras caminan, apurarlos cuando están explorando puede ser frustrante para ellos.
  2. Forzarlos a situaciones incómodas: Su cachorro puede tener miedo a los truenos, los fuegos artificiales y las aspiradoras, o a los perros dominantes en los parques para perros, lo mejor que puede hacer es leer su lenguaje corporal y comprender cómo se sienten y sacarlos del evento incómodo cuando sea necesario.
  3. Ignorar su dolor: los perros no hablan nuestro idioma, por lo que es su trabajo como propietario ser un detective del dolor y comprender cómo se sienten reconociendo cualquier signo de incomodidad, como lamerse las patas o sacudir la cabeza. Asegúrese de familiarizarse con tu perro para evitar hacerles daño.

Emociones principales

Según el East Valley Animal Hospital, los perros pueden experimentar cinco emociones principales que experimentamos los humanos: miedo, ira, disgusto, alegría y tristeza. También pueden sentir emociones más matizadas como emoción, angustia, satisfacción, ansiedad, timidez, anticipación e incluso amor.

Además, debido a que la madurez emocional de un perro se correlaciona con la de un niño de dos años, no es capaz de sentir las emociones que se desarrollan después de esta edad, como la vergüenza, la culpa, el orgullo o el desprecio.

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