Un trágico incidente ocurrió en el condado de Anne Arundel, Maryland, Estados Unidos, cuando un valiente padre perdió la vida mientras defendía a sus hijos de una pelea escolar. Christopher Michael Wright (43) fue víctima de una brutal golpiza que tuvo lugar en su propia casa.
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Los hechos comenzaron en la secundaria Brooklyn Park, donde el hijo de Wright, de 14 años, se vio involucrado en una pelea con otro adolescente durante la tarde del viernes. La disputa se intensificó y se trasladó hasta la residencia de la familia.
Según relató Tracy Karopchinsky, pareja de Wright, tres adolescentes y dos adultos llegaron a su casa en busca del menor de edad, pero no lograron encontrarlo. Ante esta situación, el padre salió para enfrentar a los agresores y evitar la violencia.
“Salió a decirles que no vendría aquí a pelear, y en un momento lo amenazaron con entrar y atraparlo, y luego dijeron: ‘Si él no va a pelear, entonces vas a pelear tú’”, contó Tracy.
Fue entonces cuando ocurrió el ataque que dejó a Christopher Michael Wright con una lesión cerebral traumática. Fue trasladado de inmediato a un centro de salud, pero lamentablemente no pudo sobrevivir.
“No fueron solo los puñetazos los que hicieron eso (...) no hay forma de que los puñetazos hicieran eso. El daño se hizo antes de que la ambulancia se lo llevara. Quiero decir, él había tenido una convulsión (...). No había nada que el hospital pudiera hacer”, señaló la mujer.
El trágico incidente fue captado por cámaras de seguridad instaladas en la zona, donde se puede observar cómo uno de los hijos de Wright encuentra a su padre después del ataque y le suplica ayuda desesperadamente.
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“Papi, papi, papi”, le grita el niño desesperado a su padre.
La comunidad se encuentra conmocionada ante este suceso, y las autoridades locales han iniciado una investigación exhaustiva. Marc Limansky, portavoz de la policía del condado de Anne Arundel, manifestó que cualquier persona que haya ayudado, instigado o sido cómplice del principal sospechoso será considerada culpable.
Tracy Karopchinsky expresó su indignación, acusando a los agresores de haber arruinado la vida de su familia y de las suyas propias. ”No solo arruinaron nuestras vidas. Sus vidas cambiarán para siempre. Las vidas de sus padres cambiarán para siempre, y nadie piensa en eso solo por una pelea”, declaró.
