Hay conmoción en Filipinas después de que un estudiante de quinto grado murió tras recibir un golpe de su maestro. El menor cursaba el quinto año de primaria en la ciudad de Antipodo. El caso de violencia ocurrido al interior de las aulas del país asiático ha dado la vuelta al mundo.
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El deceso del menor se produjo después de que el docente le propinó una bofetada que después derivó en complicaciones en su salud, lo que finalmente culminó con la muerte del menor, según informaron medios internacionales.
La víctima fue identificada como Francis Jay Dumikib, quien días antes de su deceso, acusó a su maestro de haber sido quien lo golpeó en medio de una clase, por un caso de indisciplina.
Tras el golpe recibido, el menor empezó a sentir un fuerte dolor en el oído, por lo que pidió a sus padres ser llevado al médico.
La bofetada acabó con la vida del menor
Tras la valoración médica, los especialistas pudieron determinar que el dolor que sentía el menor en la cabeza y en el oído era porque la bofetada le causó una hemorragia cerebral que al cabo de poco más de una semana se determinó como la causa de la muerte.
Luego del diagnóstico, el menor tuvo que ser internado en un hospital donde, según medios locales, Francis empezó a sentir síntomas como vómitos y mareos propios del daño cerebral ocasionada por la cachetada. La salud del menor se fue deteriorando hasta que falleció.
Una vez que se hizo público el caso, las autoridades filipinas iniciaron un investigación contra el centro educativo para determinar la responsabilidad del suceso.
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Un factor determinante en la investigación
La familia de Francis hizo eco del caso para captar la atención del de la vicepresidente del país, Sara Duterte, quien pidió a las autoridades no dejar impune el caso.
En medio de la investigación, la Secretaría de Educción de ese país también dio a conocer que ya ha desplegado una investigación interna, y que incluso ya fue identificado el profesor presuntamente responsable del caso de violencia infantil que derivó en tal tragedia.
Además, las autoridades señalaron que se inició una investigación al interior del colegio para esclarecer los hechos y a sus responsables, que estarían expuestos a fuertes sanciones o castigos de ser comprobado que la muerte del niño derivó del maltrato propinado por el maestro.
