José Luis, uno de los tres hijos de María Contreras Mella, mujer de 85 años que desapareció el pasado fin de semana en un restaurante de Limache durante la conmemoración del Día de la Madre, aportó esta mañana detalles de las teorías que maneja la PDI y el clan familiar respecto del extravío de la adulta mayor.
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Imágenes de las cámaras de seguridad del local gastronómico mostraron a la la mujer caminando por el estacionamiento con rumbo desconocido, pocos minutos después de haber ido al baño junto a sus nietas, momento en el que sin motivo alguno desapareció.
Las teorías de la desaparición
“Pensamos que cuando fue al baño ella se equivocó de puerta y salió a un pasillo y estacionamiento desconocido. Entonces, mi madre caminó en medio de los autos y se nos pierde, porque ella sigue caminando hacia una senda que pensó que era el camino de salida”, indicó José Luis, quien en el programa “Contigo en la mañana” reconoció que no pasaron siquiera cinco minutos desde su ingreso al baño cuando los 14 familiares de María se percataron de su desaparición.
“A los cinco minutos nos dimos cuenta de su pérdida y empezamos a buscarla. Rastrearon toda la zona del estacionamiento, y todo el lugar aledaño. Yo estaba al lado de la puerta que daba al baño, por eso nos dimos cuenta rápido de que no aparecía”, contó José Luis, quien recordó que en el sector había un canal de regadío, uno de los sectores donde se especula pudo haberse caído la mujer.
“Hay un canal que está al costado. Ya se ha registrado por el lado externo y ahora, este día, la Policía de Investigaciones, Bomberos y todos los encargados de su búsqueda lo harán por el interior del canal”, agregó.
“Todos se han puesto a disposición de la búsqueda, estamos muy agradecidos y a la vez angustiados. Toda la comunidad está conectada al caso de mi madre”, puntualizó.
“Lo más extraño es que si se hubiese caído hubiese quedado algo de ella en el lugar, pero no hemos encontrado nada. Ni zapatos o cualquier cosa que se le pudo haber caído. Es muy extraño eso”, prosiguió José Luis, quien reveló que su madre “era autovalente, hace poco iba sola al centro a tomarse un café, usaba micro. Y hace poco empezó con problemas de dolores, ahí la empezaron a trasladar”.
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Los detalles de la búsqueda
“Mi madre siempre sabe para donde va y donde está. Si hasta iba en micro sola. Sufre de algunas descompensaciones, cuando enfrenta situaciones de pánico”, recordó José Luis, quien indicó que “como familia hemos barrido el lugar, han pasado los drones por las barreras del campo”.
“No entendemos la distancia que pudo haber recorrido. No pudo haber sido grande por su condición física”, explicó el hijo de la mujer extraviada, quien reveló que “la PDI tiene su teoría respecto de su desaparición, que pudo haberse caído al canal, porque su trayecto estaba a 200 metros del canal”.
Otra de la teorías que se maneja en el clan familiar dice relación con la ayuda de un tercero a Contreras, quien eventualmente pudo trasladarla fuera del restaurante.
“Lo extraño es que si hubiera tomado un rumbo hacia afuera del local hay cámaras que hubiesen captado su paso a la caletera. No descartamos absolutamente nada, nos parece extraño que no haya ninguna pista. Es posible que haya sido trasladada por alguna persona desconocida. Hemos hecho un barrido desde Viña hasta Quillota, hemos ido a ver gente en situación de calle, hemos recorrido plazas, mi familia hasta se contactó con videntes, medium, y si bien en mi caso prefiero las cosas científicas certeras, como familia hemos hecho todo para encontrarla”, puntualizó José Luis.
“Como a las 15:00 y 15:10 horas ocurrió esto. Estábamos empezando a almorzar, en la entrada, con el juguito, las niñas que querían ir al baño, mi mamá se quedó de última participante del baño, y después de cinco minutos no podía demorarse tanto en lavarse las manos”, recalcó.
“Soy un poco crítico con la administración del local porque no le dieron la importancia de perderse a un adulto mayor, que es como un niño. Eso ocurrió como a las cuatro de la tarde, la preocupación fue mínima, la indolencia fue mucha, estaban preocupados más de saber quién pagaba la cuenta, porque éramos 14 personas. La indolencia en ese sentido nosotros la criticamos bastante”.
