David Gallardo, padre de Natalia Gallardo, una de las personas chilenas deportadas desde Estados Unidos, denunció el maltrato que sufrió su hija durante su detención en el país norteamericano. La joven, que se encontraba viviendo de manera irregular en dicho país, fue detenida el 27 de abril en Colorado Springs en una operación de la DEA contra el Tren de Aragua.
PUBLICIDAD
El vuelo que trajo de regreso a Santiago a Natalia y a otros compatriotas fue parte de una serie de deportaciones vinculadas a las políticas migratorias del presidente Donald Trump. De los 44 deportados, tres presentaban órdenes de detención vigentes y serían entregados a la justicia al aterrizar.
Estado de salud de la joven tras la deportación
En conversación con CHV, David Gallardo compartió que su hija “llegó en un estado deplorable”. Aseguró que Natalia sufrió una notable pérdida de peso y quedó con “un daño psicológico tremendo”.
Según él, su hija, de 30 años, había sido una ciudadana ejemplar, sin antecedentes penales y cumpliendo con sus obligaciones financieras, lo que contrastó con la situación de otros deportados que enfrentaban problemas legales.
El padre de Natalia destacó que “tuvo la mala suerte de toparse con todo esto y vivir una pesadilla”. La joven trabajaba como niñera cuando fue detenida junto a un grupo de indocumentados. David relató que el proceso de detención fue brutal y caótico, con la participación de cerca de 300 efectivos en el operativo.
“La información que tuvimos desde ese primer momento fue porque mi hija se comunicó con un activista de derechos humanos que se contactó con la prensa. Lo que nos contó fue que la DEA llegó con ICE y reventaron con bombas lacrimógenas y gas pimienta. Apuntaron a mi hija con dos fusiles de guerra en la cabeza”, detalló.
“Las llevaron en una van, las subieron, las llevaron encadenadas, engrilladas, chicas que se hicieron de todo por los nervios y no les prestaron la ayuda, fue un trato indigno”, dijo muy afectado.
PUBLICIDAD
Falta de apoyo consular
David Gallardo también criticó la falta de apoyo del consulado chileno en Estados Unidos durante la detención de su hija. “Nos dirigimos al consulado y la respuesta que nos dieron fue que no tenían los medios ni los recursos para viajar a Colorado a ayudar a los chilenos que estaban detenidos”, expresó.
El padre de Natalia subrayó que la situación fue angustiante, pues no tuvieron información sobre el estado de su hija desde el momento de su detención hasta que lograron comunicarse con ella. “Yo estuve en ese local allá, yo estuve, yo pagué mi entrada, eran 25 dólares, con guardia armado, con detector de metal, un local que estaba en una avenida principal en Colorado Springs. Y mi hija tuvo la mala suerte de pasar justo por ese local y se topó con eso, y empezó un calvario”, relató David.
