Durante su última Cuenta Pública, que se llevó a cabo el pasado domingo 1 de junio, el Presidente Gabriel Boric Font anunció que Chile cerrará todas sus termoeléctricas a carbón antes de 2035. El proyecto de ley se enmarca en los compromisos medioambientales del país, el cual busca acelerar la descarbonización de la matriz energética nacional. En un principio, la meta era para 2040, no obstante, se busca adelantar esa fecha según las condiciones técnicas e institucionales.
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“Durante el segundo semestre ingresaremos un proyecto de ley de descarbonización acelerada que permitirá facilitar las inversiones necesarias para terminar con las termoeléctricas a carbón”, dijo en la jornada dominical, destacando en la necesaria colaboración entre sectores públicos y privados que será clave para cumplir los objetivos trazados.
Si bien el jefe de Estado reconoció que esa una meta compleja de cumplir, aseguró que su Gobierno la asume con “convicción y responsabilidad”.
Desde Atacama, la diputada Sofía Cid (Rep), expresó su preocupación por los efectos que esto podría provocar en la región, por ejemplo, en la Provincia del Huasco, Región de Atacama, donde las centrales termoeléctricas son una fuente relevante de empleo y actividad económica: “Es necesario analizar detenidamente el impacto que esto tendrá en las cuentas de la luz y en la tasa de empleo donde operan este tipo de centrales”, sostuvo la parlamentaria.
Frente a esto, Cid subrayó en la importancia de contar con una estimación clara sobre la posible alza en la electricidad, considerando que los atacameños se han visto fuertemente afectados por los aumentos en las cuentas de luz.
Por último, la congresista hizo un llamado a que este tipo de decisiones vengan acompañadas de políticas claras de reconversión laboral y apoyo económico para las comunidades afectadas, de manera que la descarbonización se realice de forma equitativa y sostenible.
