Los niños y jóvenes hoy tienen el mundo literalmente en su mano, premunidos de un teléfono celular que les puede sumergir en un formidable bagaje cultural que antes demandaba apelar a decenas de libros y documentos o -simplemente- poner a su alcance ofertas y tentaciones que, sin un control adecuado, les conduzcan a opciones tan peligrosas como perjudiciales.
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A la consulta de los especialistas de la salud mental hoy llegan incontables casos de jóvenes y adultos atrapados por la nomofobia, término que describe el miedo irracional a estar sin teléfono móvil o a no estar conectado.
Y esa dependencia, tan común en la actualidad, se agudiza cuando revela otras manifestaciones que afectan más gravemente el comportamiento de niños y adolescentes. Por ejemplo, entre ellos se encuentra la ludopatía, la adicción al juego y las apuestas digitales que refleja un crecimiento explosivo en los menores chilenos.
Aunque no se trate de una sustancia física, el juego funciona como una “droga intangible” que activa el sistema nervioso central, señala un estudio reciente. Esa respuesta cerebral puede derivar en una conducta adictiva, sobre todo cuando el acceso es fácil, constante y discreto, como ocurre con los celulares o computadores. Y durante la pandemia, ese riesgo se intensificó: muchas personas pasaron más tiempo aisladas, conectadas y emocionalmente vulnerables, en un contexto donde las plataformas digitales de apuestas crecieron de forma explosiva.
En ese contexto, la cinta “El camino” pretende dar una voz de alerta sobre el tema, sustentado en relatos y testimonios reales para generar debate sobre los riesgos de las apuestas digitales en los menores de edad. Se trata de un cortometraje chileno, fruto de la alianza entre Wolf BCPP, la productora Landia y la Fundación Contradicción.
·Todo comienza con el acto de observar: la presencia de las casas de apuestas en los medios es cada vez mayor y más agresiva. Eso nos llevó a explorar esta problemática, especialmente el impacto de la digitalización en públicos más jóvenes", señala Matías Anríquez, director creativo de “El camino”.
La ludopatía, un enemigo en la familia
Con un efoque documental íntimo y realista, la cinta profundiza en la experiencia de una familia que enfrenta la adicción de su hijo a las apuestas digitales. Según sus creador, es desafío fue “tratar lo que pasa en una familia cuando se enfrenta algo tan delicado como una adicción, sin caer en clichés o exageraciones”.
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Durante la investigación, se accedió a decenas de testimonios recogidos por la Fundación “Apostar no es un juego”, con relatos provenientes de menores de edad. “Fue impactante ver casos que perfectamente podrías atribuir a adultos con una adicción, solo que aquí venían de niños hablando de pérdida de control, de deudas, de ansiedad. Fue difícil de procesar”, agrega el cineasta.
La Fundación Contradicción, creada por Daniel Fuenzalida, advierte que el trastorno de juego en menores no es un problema de voluntad, sino una combinación de factores psicológicos profundos: impulsividad, dificultades en la regulación emocional y evasión de estados emocionales negativos.
“En muchos casos, los juegos y apuestas digitales son usados como una forma de regular emociones difíciles o escapar de la realidad. Hay pérdida de control, problemas de sueño, ansiedad, culpa y aislamiento. Y todo esto puede comenzar muy temprano, incluso en la infancia”, explica la psicóloga Andrea Gajardo.
Entre los síntomas más comunes destacan el juego excesivo y prolongado; engaño o secretismo sobre el comportamiento de juego; problemas financieros, familiares y sociales; creencias distorsionadas sobre la suerte o el control del resultado; consecuencias emocionales como ansiedad, depresión y pérdida de interés en otras actividades.
Aunque inicialmente fue pensado para su proyección en las salas de cine, “El Camino” también está disponible en las redes sociales, incluyendo el canal de YouTube de la Fundación Contradicción.
