Una intensa búsqueda se desplegó la noche del miércoles en Angol, región de La Araucanía, luego de que se reportara la desaparición de un niño de 9 años. El menor había sido visto por última vez cerca de las 18:30 horas, tras juntarse a jugar fútbol con compañeros en el sector Villa Emaus.
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Al no regresar a su hogar y no tener noticias de él, sus padres dieron aviso a Carabineros, lo que activó una alerta por presunta desgracia cerca de las 23:00 horas. Sin embargo, la angustia terminaría con un giro completamente inesperado.
Según detalló el comandante Ricardo Sepúlveda, de la Comisaría de Angol, “luego de hacer un análisis de las cámaras de todo el sector, de la trayectoria que tendría que haber hecho el niño desde la cancha hacia su domicilio, todo indicaba que podría haber llegado a su hogar”.
Fue entonces cuando Carabineros decidió ingresar al domicilio familiar. La sorpresa fue total: el niño estaba en su casa, durmiendo en su habitación, sin que nadie lo hubiera notado.
“En estas circunstancias, Carabineros ingresó al domicilio y logró ver que el niño se encontraba durmiendo y que estaba bien. Igual hay que hacer la constatación de lesiones y cerrar el ciclo por la denuncia que habían realizado los papás”, explicó el comandante Sepúlveda, según consignó BioBioChile.
Respecto a la confusión, el oficial precisó que se debió a un cambio de planes del menor: “El niño tendría que haber llegado al domicilio de los abuelos y en realidad, en vez de irse para allá, se fue a su casa”, indicó. Por lo que, afortunadamente, todo quedó en una anécdota sin consecuencias graves.