Estados Unidos envió un portaviones a las aguas frente a Sudamérica, en la más reciente escalada y aumento de la presencia de sus fuerzas militares en la región, según anunció el Pentágono este viernes en la tarde. La decisión se produce menos de 24 horas después de que las fuerzas militares estadounidenses atacaran una nueva lancha en el Mar Caribe, matando a seis personas.
El USS Gerald R. Ford, que tiene cinco destructores en su grupo de ataque, está desplegado actualmente en el mar Mediterráneo. Una persona familiarizada con la operación dijo a The Associated Press que uno de esos destructores está en el mar Arábigo y otro en el mar Rojo. En el momento del anuncio, el portaviones estaba en un puerto de Croacia, en el mar Adriático.
¿Por qué el gobierno de Trump envía un portaviones a Sudamérica?
El secretario de Defensa, Pete Hegseth, ordenó el despliegue del USS Gerald R. Ford y su grupo de ataque en el Comando Sur para “reforzar la capacidad para detectar, monitorear y obstaculizar a actores y actividades ilícitas que ponen en riesgo la seguridad y la prosperidad de Estados Unidos”, dijo el portavoz del Pentágono, Sean Parnell, en una publicación en redes sociales.
El despliegue de un portaviones es una gran escalada de poder militar en una región donde ya se ha producido un aumento inusualmente grande de la presencia militar estadounidense en el mar Caribe y las aguas frente a Venezuela.
Estados Unidos se centra en Venezuela y el Tren de Aragua
La noche del jueves, las fuerzas armadas de Estados Unidos realizaron el 10° ataque contra una embarcación sospechosa de transportar drogas, matando a seis personas y elevando el número de muertos de la campaña, que comenzó a principios de septiembre, al menos a 43 personas.
Hegseth afirmó que la embarcación atacada durante la noche era operada por la banda Tren de Aragua. Fue la segunda vez que el gobierno del presidente Donald Trump vincula una de sus operaciones con la banda, que se originó en una prisión venezolana.
El ritmo de los ataques se ha acelerado en los últimos días, pasando de uno en varios días cuando comenzaron, a tres en esta semana. Dos de los ataques más recientes también se llevaron a cabo en el Pacífico oriental, ampliando el área en que el Ejército estaba dispuesto a realizarlos y pasando a la zona donde se contrabandea gran parte de la cocaína de los principales productores del mundo.
El gobierno de Trump designó como organización terrorista extranjera al Tren de Aragua, a la que culpa de ser el origen de la violencia y el tráfico de drogas que azota a varias ciudades.
Sin mencionar el origen de las embarcaciones, el gobierno republicano afirma que al menos cuatro de los botes atacados provenían de Venezuela.
Los ataques y un aumento inusualmente grande de la presencia militar estadounidense en el Caribe y en las aguas frente a Venezuela han aumentado las especulaciones de que el gobierno podría tratar de derrocar al presidente venezolano Nicolás Maduro, que enfrenta cargos de narcoterrorismo en Estados Unidos.
En su acción más reciente, el Ejército de Estados Unidos voló un par de bombarderos pesados supersónicos hasta la costa de Venezuela el jueves.

