La comunidad escolar del Colegio Nuevo Milenio de Villa Alemana está impactada. Una apoderada simuló que su hijo padecía una enfermedad grave con el objetivo de recaudar dinero entre los padres y apoderados. Según fuentes de la institución, la mujer difundió mensajes y justificó una campaña de ayuda económica aduciendo altos costos médicos y la urgencia del tratamiento.
La dirección del colegio tomó conocimiento del caso tras varios padres manifestar dudas sobre la veracidad de la situación, lo que motivó una revisión interna de las comunicaciones enviadas.
Posteriormente, se dio inicio a una denuncia ante la Fiscalía de Chile para que se investigue si efectivamente existió engaño y apropiación de fondos. La mujer fue formalizada por estafa.
En su declaración, la apoderada habría reconocido haber solicitado dinero “a nombre del menor”, pero negó haberlo hecho con intención de fraude, asegurando que actuó “mal informada” y que su hijo sí presentaba síntomas. La fiscalía, en tanto, revisa elementos como transferencias bancarias, testimonios de apoderados y comunicaciones de la campaña solidaria.
Testigos señalan que la campaña se viralizó dentro de la comunidad del colegio, incluyó cuentas bancarias y mensajes por redes sociales, y que se logró recaudar un monto significativo antes de que surgieran las primeras preguntas sobre la autenticidad del diagnóstico.
Según la presidenta del Centro General de Padres, Fabiola Ávila, si bien no alcanzaron a entregar los dineros, sí pudieron averiguar que sería una práctica que habría realizado previamente en otras instancias.
De acuerdo a lo que informa Emol, a la dirigenta y al resto de los apoderados les llamó la atención que mientras pedía dinero también la acusada hacía viajes fuera del país. “Vimos que ella se iba de vacaciones al Caribe con su familia, que obligaba a uno de sus hijos a grabar para mandar información (...)”, detalló.
El abogado patrocinante, Cristian Canifrou, sostuvo que “la directiva del Centro General de Padres hizo algunas consultas con el organismo por el cual ella había acompañado documentos y se logra establecer que esta documentación era completamente falsa, se pone en conocimiento del colegio y la imputada inmediatamente retira a los hijos del colegio y termina el año escolar para ella”.
Representantes del establecimiento manifestaron que “lamentan profundamente lo ocurrido” y están colaborando con las autoridades. También anunciaron que reforzarán protocolos para campañas de recaudación internas, así como mayor supervisión ante solicitudes de ayuda económica que involucren a menores.