La investigación por el secuestro con homicidio de la joven Krishna Aguilera sumó este viernes dos nuevas detenciones, ampliando el círculo de sospechosos involucrados en el crimen ocurrido en octubre pasado en la Región Metropolitana. La Policía de Investigaciones (PDI) confirmó la aprehensión de un nuevo implicado y la entrega voluntaria de otro sujeto de interés en el caso.
Durante la madrugada, la Brigada de Homicidios detuvo a Luis Armando Inostroza, de 44 años, conocido como “El Krosty”, a quien se le imputa participación directa en la inhumación clandestina del cuerpo de la víctima.
Aguilera, una joven madre de 19 años, fue hallada enterrada en la ladera del cerro Chena, en la zona de Calera de Tango, 22 días después de haber sido reportada desaparecida desde San Bernardo.
Horas más tarde, un segundo individuo —identificado como Kevin Aillapán Carroza— llegó hasta dependencias de la PDI para entregarse voluntariamente. El joven contaba con una orden de detención vigente que había sido gestionada el día anterior, pero no se encontraba en su domicilio al momento del procedimiento policial. Aillapán se presentó acompañado de familiares y su abogada defensora.
Según explicó la profesional, su representado decidió acudir por iniciativa propia: “Él decidió venir a entregarse porque señala no haber tenido participación respecto al homicidio”, sostuvo, según recogió 24 Horas.
Aillapán sería además el residente de la vivienda allanada este jueves en San Bernardo, diligencia que forma parte de las acciones para reconstruir los movimientos previos y posteriores al crimen.
El caso, que generó conmoción pública por la violencia del secuestro y la posterior ejecución, mantiene actualmente a cinco personas en prisión preventiva, entre ellas el narcotraficante Juan Beltrán, sindicado como el líder de la banda que habría ordenado el asesinato de Aguilera. De acuerdo con la indagatoria, el crimen se habría ejecutado como venganza por una quitada de drogas.