La influencer británica Brittany Miller, de 29 años, se convirtió en el centro de una fuerte polémica luego de reconocer públicamente que nunca padeció cáncer. En un video difundido en su cuenta de TikTok, la joven explicó que su engaño no tuvo fines maliciosos, sino que surgió en un momento de vulnerabilidad personal.
¿Quién es Brittany Miller?
Brittany Miller es una influencer británica originaria de Oxfordshire, conocida por su contenido en TikTok, donde comparte temas de estilo de vida, comida y su vida familiar, con más de 3,5 millones de seguidores.
En 2017, afirmó padecer cáncer gástrico en etapa 3, lo que generó una página de recaudación de fondos, aunque recientemente confesó que la enfermedad era falsa. A raíz de la polémica, ofreció disculpas públicas y señaló que su experiencia le permitió reflexionar sobre la importancia de la salud mental y su responsabilidad como figura pública.
La historia detrás del falso diagnóstico
La confesión de Miller llegó apenas una semana después de que el tabloide The Sun expusiera detalles sobre la supuesta enfermedad y la existencia de una página de recaudación de fondos abierta en su nombre.
La noticia provocó indignación entre seguidores, especialmente entre quienes habían apoyado a Miller y tenían familiares afectados por el cáncer.
Salud mental y búsqueda de apoyo emocional
En su video de disculpa, Miller relató que la mentira se originó durante uno de los períodos más difíciles de su vida:
“En 2017 enfrentaba problemas graves de salud mental. Estaba deprimida, con pensamientos suicidas, perdida y confundida. Había perdido a mi pareja, mi trabajo… ese año estuvo marcado por muchas dificultades que afectaron seriamente mi bienestar emocional”.
La influencer enfatizó que su objetivo no era aprovecharse económicamente de otros ni buscar fama en redes sociales.
Lo que ocurrió con las donaciones
Sobre la página de recaudación de fondos, Miller aclaró que no recibió dinero alguno. Según su testimonio, la iniciativa fue creada por terceros que conocían su historia, y apenas se enteró de las donaciones, solo dos en total, cerró el sitio inmediatamente.
“Nunca pedí que se abriera la página y no recibí ni un centavo. Esto ocurrió antes de que mi vida en redes sociales se hiciera pública y no fue un intento de ganar seguidores”, explicó Miller.
