Santiago volvió a amanecer bajo un sol implacable y temperaturas que reflejan el adelantamiento del verano en pleno noviembre. La capital vive una racha de calor que no da tregua, con máximas que rozan los 30 °C y una sensación térmica todavía más intensa en sectores urbanos densos. Aunque muchos esperan un cambio inmediato, los pronósticos oficiales coinciden: el calor seguirá hasta mañana y la lluvia, al menos por ahora, no aparece en el horizonte.
Los reportes meteorológicos muestran un patrón claro: cielo despejado, baja humedad y un índice UV que alcanza niveles considerados “extremos”. Para este lunes, la máxima ronda los 29 °C en gran parte de la Región Metropolitana, un registro habitual para diciembre pero adelantado este año.
La radiación solar también se disparó, con recomendaciones de protección reforzadas para evitar daños en la piel. Las autoridades sanitarias insisten en hidratarse y reducir la exposición al sol entre las 11:00 y las 17:00.
¿Qué se espera para mañana 25 de noviembre?
Pese a los rumores de un posible “cambió brusco” o incluso lluvias, los modelos del tiempo descartan precipitaciones para este martes. La máxima caerá apenas un punto —cerca de 28 °C—, pero seguirá siendo una jornada calurosa, con cielo completamente despejado y una mínima cercana a los 12 °C.
El viento será leve a moderado por la tarde, mientras la humedad se mantendrá baja, lo que aumenta la sensación de sequedad en el ambiente.
El gran cambio podría llegar hacia fin de semana
Los meteorólogos están siguiendo un sistema frontal que avanza desde el sur y que podría llegar a la zona central hacia jueves o viernes. No se trata de un evento de lluvia asegurado para Santiago, pero sí de un escenario que podría cortar la racha de calor y empujar un descenso más marcado en las temperaturas.
Por ahora, el pronóstico oficial mantiene cero milímetros de agua y un contexto completamente estable en la capital.
Impacto del calor en sectores urbanos y zonas periféricas
Comunas como Cerrillos, Quinta Normal, Maipú y Puente Alto registran temperaturas más altas debido al “efecto isla de calor”, generado por el pavimento, el tráfico y la baja presencia de áreas verdes. En el centro de Santiago, la sensación térmica suele ser 1 o 2 grados superior a la reportada por estaciones oficiales.
En zonas precordilleranas como La Reina Alta, Peñalolén y Lo Barnechea, en cambio, el calor se concentra más en horas de la tarde, con descensos más rápidos durante la noche.
Recomendaciones clave para enfrentar las próximas horas
- Buscar sombra o espacios interiores ventilados durante las horas punta.
- Usar protector solar factor 50 o más.
- Evitar actividad física al aire libre cuando el sol esté más alto.
- No dejar mascotas ni niños dentro de vehículos estacionados.
- Aumentar el consumo de agua, incluso sin sentir sed.
El panorama nacional: la ola de calor golpea a varias regiones
La situación no solo afecta la capital. Regiones como Valparaíso, O’Higgins y Maule experimentan temperaturas similares o incluso mayores, con máximas entre los 30 °C y 33 °C en zonas interiores.
En sectores agrícolas, el calor comienza a generar preocupación por estrés hídrico y posibles efectos en cultivos sensibles. También aumentan los riesgos de incendios forestales, motivo por el cual CONAF llamó a extremar cuidados y evitar cualquier acción que pueda iniciar un foco.

