El proceso de transformación del penal Punta Peuco —hoy Centro de Cumplimiento Penitenciario Til‑Til — sufrió un revés este lunes, cuando Carlos Poblete, juez de turno del Juzgado de Garantía de Colina, instruyó detener la remoción de enseres como refrigeradores y toldos del recinto.
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La medida llega luego de que internos y sus defensas presentaran un amparo apoyado por familiares, argumentando que dichos elementos —utilizados para visitas y enseres personales— no podían ser retirados mientras estuviera vigente una orden de no innovar emitida previamente por la Corte de Apelaciones de Santiago.
Según fuentes judiciales consultadas por La Tercera, el juez Poblete acudió al penal alrededor del mediodía y ofició a los funcionarios penitenciarios a acatar la orden de no innovar.
La decisión deja en pausa el plan de reconversión del recinto, que contemplaba adecuarlo a estándares de cárcel común eliminando los privilegios —como uso de toldos en patios y electrodomésticos personales— que caracterizaban al ex Punta Peuco.
Desde Gendarmería, indicaron que los trabajos de habilitación ya estaban en marcha conforme al calendario establecido, y que la remoción de toldos y enseres había sido notificada previamente a la población. Sin embargo, añadieron que acatarían la orden judicial mientras se resuelve el fondo del amparo.