El misterio de 3I/ATLAS sigue creciendo. Cada nueva imagen, cada medición y cada análisis generan nuevas preguntas. Y ahora hay una idea que está ganando fuerza entre científicos: el cometa podría tener “volcanes de hielo” funcionando por dentro. Esta hipótesis, conocida como criovulcanismo, podría aclarar varios de los comportamientos extraños que han confundido a los astrónomos desde julio de 2025.
¿Qué es el criovulcanismo y por qué importa?
El criovulcanismo es un proceso en el que un objeto espacial expulsa gases y compuestos desde su interior, no desde su superficie. En lugar de lava como en un volcán terrestre, los “volcanes” expulsan agua congelada, gases, dióxido de carbono y polvo metálico.
Este mecanismo ya se ha visto en objetos lejanos del Sistema Solar, como Encélado (luna de Saturno) o Tritón (luna de Neptuno), pero nunca en un cometa interestelar que acaba de llegar de otro sistema estelar.
Si los datos se confirman, 3I/ATLAS no sería un cometa cualquiera: sería el primer cometa interestelar cryovolcánico documentado.
Lo raro que los científicos quieren explicar
Los investigadores están intentando resolver varias anomalías de 3I/ATLAS:
- Coma dominada por dióxido de carbono (CO₂) en lugar de agua, algo poco común.
- Señales UV de agua liberándose incluso cuando estaba lejos del Sol.
- Jets y pulsos periódicos que parecen “latidos”, con un ritmo de 16.16 horas.
- Composición rica en metales, similar a ciertos meteoritos primitivos hallados en la Antártida.
- Aceleración no gravitacional difícil de justificar solo con sublimación.
Estas piezas sueltas nunca habían aparecido juntas en un mismo objeto.
¿Qué dicen los investigadores?
Un paper publicado el 24 de noviembre de 2025 propone un modelo químico interno:
- El cometa contendría hielo, agua, CO₂ y metales como hierro y níquel.
- Al calentarse cerca del Sol, estos metales podrían reaccionar químicamente con el agua.
- Esa reacción, conocida como Fischer–Tropsch, libera energía y volátiles, causando explosiones internas parecidas a géiseres.
En palabras simples: el cometa estaría “hirviendo por dentro” y expulsando material como un volcán de hielo.
¿Esto significa que el cometa es artificial?
No necesariamente. La teoría del criovulcanismo evita las conclusiones exóticas sobre tecnología o propulsión alienígena. Ofrece una alternativa natural para explicar los “latidos”, los jets y la química extraña.
Sin embargo, algunos científicos —como el astrofísico Avi Loeb— siguen insistiendo en que las anomalías son demasiadas y demasiado ordenadas para un simple cometa. Según él, aún hay que responder preguntas sobre:
- la aceleración no gravitacional,
- el presunto “enjambre” en la anti-cola,
- y las coincidencias orbitales con Júpiter.
Por ahora, el criovulcanismo no resuelve todo… pero resuelve mucho.
¿Qué viene ahora?
La clave estará en los próximos meses:
- Nuevas observaciones del James Webb, del satélite Swift, y de telescopios terrestres.
- Seguimiento de los “latidos” de brillo.
- Monitoreo del paso por Júpiter en marzo de 2026, cuando 3I/ATLAS estará bajo lupa
Si los investigadores logran detectar patrones repetidos de expulsión y cambios químicos, esta teoría podría convertirse en la más aceptada dentro de la comunidad científica.
Por ahora, 3I/ATLAS sigue siendo un cometa incómodo. Obliga a los astrónomos a replantear conceptos básicos, y eso es exactamente lo que vuelve tan fascinante a este visitante interestelar.

