Funcionarias y funcionarios de los Cesfam de Lo Espejo, en la región Metropolitana, mantienen desde el jueves 18 de diciembre una serie de manifestaciones en rechazo al presunto acoso laboral que habría sufrido Camila González Ñanco, enfermera del Cesfam La Estrella, quien tomó la decisión de quitarse la vida. La joven, según fuentes cercanas, habría dejado una carta en la que denunciaba situaciones de hostigamiento por parte de su jefatura.
Las protestas se concentran principalmente en la intersección de Avenida Central con Américo Vespucio, frente a la municipalidad, donde decenas de funcionarios de los cuatro Cesfam de la comuna han expresado su indignación y preocupación por las condiciones laborales en los centros de salud.
Adela Saavedra, vocera y dirigenta de los funcionarios de la salud, explicó en el programa La Tarde es Nuestra de Canal 13 que las manifestaciones buscan visibilizar la situación y exigir respuestas claras por parte de las autoridades. “Estamos denunciando la pasividad que ha tenido el gobierno local con respecto a la triste decisión de nuestra compañera de quitarse la vida y que se desarrollen los sumarios que tienen que desarrollarse para investigar si efectivamente hubo acoso laboral”, señaló.
Según testimonios de colegas cercanos a Camila González, la enfermera habría sido víctima de hostigamiento por parte de su jefatura, lo que habría influido en su decisión final. La dirigenta agregó que es fundamental esclarecer si la muerte de la joven está vinculada al acoso laboral que denunciaba, así como garantizar que se tomen medidas preventivas para proteger al resto del personal.
Otro elemento que genera preocupación entre los trabajadores es que la enfermera, antes de su fallecimiento, debía capacitar a una nueva funcionaria que la reemplazaría, tras la comunicación de que su contrato no sería renovado. Esta situación habría aumentado la presión sobre la profesional, según señalaron sus compañeros.
“Necesitamos esclarecer si ese acoso existió y que finalmente la compañera decidió terminar con su vida”, sostuvo la funcionaria.
Las movilizaciones buscan no solo rendir homenaje a la enfermera fallecida, sino también visibilizar la situación de vulnerabilidad de los funcionarios de la salud en la comuna y exigir a la municipalidad y a los organismos competentes la investigación completa de los hechos. Las trabajadoras insisten en que la prevención del acoso laboral y la protección de los equipos de salud deben ser prioridad para evitar tragedias similares en el futuro.