Este miércoles 10 de agosto ocurrió un hecho bastante vergonzoso en una de las audiencias de la Corte de Apelaciones de Santiago, en donde uno de los abogados no logró defender a su cliente tras afirmar que se encontraba “más cocío que botón de oro... (sic)”.
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Según la información entregada por Cristián Alcántara, el relator que certificó los hechos ante la 13° Corte de Apelaciones, a las 8:00 horas se enviaron las credenciales informáticas necesarias para acceder a una determinada audiencia. Sin embargo, el abogado en cuestión no accedió a la sala de espera de la aplicación momentos previos al encuentro.
A eso de las 11:38 horas, Alcántara tomó contacto con el abogado por otras vías y fue ahí donde “la comunicación se dificultó dada la extraña e inadecuada forma en que el litigante se expresó”.
A pesar de este hecho, igualmente se le enviaron los datos informáticos, tanto vía mail como por WhatsApp, por lo cual el profesional tenía las herramientas para tener toda la vista de la causa.
Llegó su turno de alegar y todo se derrumbó, puesto que solamente lo hizo por 20 segundos, siendo que había solicitado 20 minutos. En este momento, se advirtió que estaba hablando con cierta dificultad.
Finalmente, el hecho terminó delatando al abogado fue que envió un mensaje de audio -se cree que por error- en donde confirmó que no estaba en condiciones de ver los datos que le habían sido remitidos para asistir a la audiencia. “Estoy más cocío que botón de oro...” (sic) fueron las palabras del profesional.
