Si en el trabajo se siente agobiado y con ganas de renovar energías, uno de los panoramas ideales para tomar un buen descanso es el Valle del Elqui. Un lugar rodeado de montañas, ríos y un cielo iluminado de estrellas, ubicado a 500 kilómetros de Santiago y 60 de La Serena. Lo necesariamente lejos como para desconectarse de la pega y lo suficientemente cerca para llegar en 50 minutos en avión desde la capital, aprovechando los pasajes low cost que ofrecen empresas como Sky Airline.
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Mirar la Vía Láctea, meditar a los pies de la cordillera en la Estupa de la Iluminación -ubicada en el pueblo Cochiguaz donde los budistas señalan está el punto de máxima energía Kundalini en el mundo- y visitar la viña Cavas del Valle, para degustar la amplia variedad de vinos orgánicos y un exquisito Late Harvest tinto, único endulzado cien por ciento natural, sin azúcar, son algunas de las múltiples actividades que ofrece este místico lugar de cielos despejados de la región de Coquimbo y que Isidora del Río, directora de Vive Chile, recomienda conocer tras visitar la zona con un grupo de fotógrafos e influencers para promocionar el alicaído sector turístico debido a la pandemia.
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“#ViveChile es una campaña que busca difundir diferentes sitios turísticos y conectar con la identidad de la gente local para que el público pueda saber dónde comer, dónde alojarse y qué actividades realizar cuando visita una zona del país. Este es un lugar con un enorme valor cultural, con diferentes rutas enológicas y gastronómicas”, explicó a Publimetro.
Partiendo el viaje
Desde el aeropuerto de La Serena puede arrendar uno de los autos de la empresa Avis y recorrer a sus anchas el verdoso paisaje, los viñedos y cerros que lo acompañarán durante todo el viaje.
La primera parada -para hospedarse en un lugar natural con laguna, cascada y leña para encender la bosca en las acogedoras habitaciones - es en el pueblo El Molle y conocer el hermoso Hotel Vertientes de Elqui (@lasvertientes). Tiene piscina, sala de masajes, restaurante, salón de eventos y clases de yoga a orillas del río. Lo mejor, un reponedor desayuno, servido por tres jóvenes hermanos, quienes se encargan de cada detalle.
Para almorzar, si gusta de la cazuela, pastel de choclo o un cabrito con papas fritas lo mejor es visitar el restaurante Eclipse Solar, ubicado frente al museo de la Premio Nobel de Literatura, Gabriela Mistral, en Vicuña. Desde ahí, y tras sacar las respectivas selfies a los abundantes platos, ya es hora de estirar las piernas y conocer la historia donde habitaron las culturas Ánimas, Molle y Diaguitas, hasta que llegaron los Incas.
Si no quiere perderse, lo ideal es contratar los servicios de Turismo Migrantes e internarse montaña arriba en un trekking o cabalgata hacia la vertiente Las Tolas. Su agua dulce proviene de un glaciar de roca y tiene propiedades curativas, explica uno de los guías y cuidadores de este lugar que fue convertido en Santuario de la Naturaleza debido a la presencia de dos especies de gatos: andino y colocolo.
Otro panorama imperdible es realizar un astrotour y contemplar el cielo en un observatorio natural, donde podrá ver Saturno de forma nítida y pedir cuánto deseo quiera con todas las estrellas fugaces que contará por minuto. Todo esto, mientras disfruta un pisco sour cortesía de los guías turísticos que conocen las constelaciones como la palma de su mano y las explican en un lenguaje didáctico y entretenido. (@turismomigrantes).
¿Dónde cenar?
Como no todo puede ser llenar el alma, también hay momentos para el esparcimiento de mantel largo.
El Sauce Restaurante, es un pintoresco lugar ubicado en Vicuña (Los Guindos #24), ideal para comensales con alma de artistas que gustan de una decoración colorida y con un piano disponible para quienes saben ponerle ritmo a la velada. Ricos platos gourmet cautivarán su paladar, con una gran variedad de pescados, como un exquisito atún encostrado con maní o carnes a la parrilla y comida vegana, para todos los gustos. Si es de las personas que echa humo, tiene una acogedora y hermosa terraza, llena de flores y un telescopio para mirar las estrellas. (@el_sauce_restaurante).
Antawara Bar de Piscos es otro restaurante recomendadísimo por su cocina de autor, elegante ambientación y excelente atención. Para comenzar, un sour copao (fruto del Valle del Elqui que puede pedir de regalo, de parte de Publimetro). De fondo, un tierno salmón papayero, ideal para los gustos agridulces y de bajativo degustar la amplia variedad de los mejores piscos de la región, como Lapostolle, Kappa y Monte Fraile, entre muchos otros que tienen en su amplia barra. (@antawarabardepiscos).
Con todo esto, le prometemos que va a quedar con las energías totalmente renovadas para terminar el año de la mejor manera. Y tal como decía Gabriela Mistral en su poema “Valle del Elqui”, sentirá que “van a mirarme los cerros”, puesto que con todas las delicias, brebajes y experiencias que absorberá quedará absolutamente conectado con la naturaleza.