Una polvareda de proporciones se generó esta semana entre los usuarios de redes sociales, luego que algunas cuentas faranduleras de Instagram publicaran el pasado martes parte del íntimo diálogo filtrado por una escort nacional con el cantante urbano Pailita.
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Las cuentas @toxicochilensis y @cachaguarealityy reprodujeron el pantallazo que la trabajadora sexual había viralizado en su red social, donde mostró el diálogo que recibió desde la cuenta verificada del artista en Instagram, y en el que el cantante que se presentó junto a Polimá Westcoast en la pasada Teletón, bromea con un eventual servicio de la escort.
La defensa a Pailita
“Constantemente existen filtraciones pero, ¿cuál será el real motivo de mostrar estas conversaciones?”, señala la publicación de ambas cuentas de Instagram, que en menos de un día se llenaron de comentarios de usuarios que criticaron la actitud de la escort, de andar ventilando datos de sus clientes más famosos.
Una de ellas, de la exCalle 7, Valentina Roth, quien con unos emojis y una contundente palabra lamentó que se filtrara el diálogo privado del cantante urbano.
“Sapa”, de la bailarina, que se unió a otros variados reclamos de usuarias que lamentaron la filtración en contra de Pailita.
“Que es sapa la mina, si es escort pa’ qué lo hace público, si le pagan más encima”, “¿Dónde quedó el secreto y ética profesional de esta mujer? Por Dios” o “Demanda”, que le dieron un respaldo al artista urbano.
Otras, incluso recordaron el pasado episodio que vivió el retirado futbolista y actual comentarista deportivo, Mauricio Pinilla, quien fue captado en varios registros audiovisuales por la escort Natthy Chilena, cuando fue a visitarlo a su departamento en La Dehesa.
“Cuando una escort sapea automáticamente no sirve (...) ahora nadie le va a querer contratar los servicios si es famoso, igual que la Natthy Chilena que siempre suelta a quien atendió de la TV”, “buenísima su ética profesional como escort al filtrar éstas conversaciones. La privacidad del cliente se la pasan por el mándala cuando quieren sus cinco minutos de fama”, o “el afán de estas chiquillas de hacerse famosas así. Nadie critica el trabajo que tienen, pero para qué andar exponiéndolos, si ellos son clientes, debería ser secreto. Tan poco valor se tienen que deben colgarse de alguien más”.
