Un llamativo y original cartel denuncia una difícil situación que vivió una emprendedora de la localidad de Romeral, región del Maule.
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María Altamira se llama el local emprorio especializado en la venta de mermeladas, chocolates, tortas, alfajores y conservas, que se ubica en el kilómetro 2 de la Ruta J-55 y debió cerrar tras ser víctima de un robo.
“Cerrado por delincuencia” y “yo pago mis impuestos y patentes, reclamo seguridad” rezaban algunos de los letreros que instaló su propia dueña, María Ninet.
Fue la misma emprendedora quien contó a Vivimos la noticia que los delicuentes “me rompieron un vidrio y robaron algunas cosas. La verdad es que escuché un disparo y pensé lo peor. Llamé a Carabineros y nunca entró la llamada, después supe que andaban en otro procedimiento en el sector de La Unión”.
Como si fuera poco, los malhechores, también reveló que los antisociales “mataron a uno de mis pastores alemanes, porque era imposible que saliera de la reja que tengo acá. Algo le hicieron”.
“Aquí vivieron mis abuelos y yo pasé gran parte de mi infancia. Romeral no era así, era una comuna que tenía 11 mil habitantes, ahora han ingresado cerca de seis mil más, muchos de ellos extranjeros”, dijo con tristeza la mujer al citado medio.
Por todo lo ocurrido, María Ninet dijo que se reunirá con el alcalde Carlos Vergara Zerega, para que se instale una unidad policial más cerca del lugar, subrayando que “son las mujeres quiénes salen a pelear por sus derechos”.
